Megayates

El fundador de WhatsApp despliega su flota de lujo en aguas de Ibiza y Formentera

El megayate de Jan Koum es tan solo una de las embarcaciones de lujo que surca en verano mar pitiuso. Hace apenas una semana, el yate del nieto de Amancio Ortega también fondeaba frente a las costas de Ibiza

El megayate del fundador de WhatsApp surca estos días aguas de Ibiza y Formentera
El megayate del fundador de WhatsApp surca estos días aguas de Ibiza y FormenteraPeriódico de Ibiza

El litoral de Ibiza y Formentera se convierte cada verano en un escenario flotante de lujo y poder. Las cristalinas aguas pitiusas son el lugar elegido por algunos de los empresarios y figuras más influyentes del mundo para disfrutar de la temporada estival a bordo de embarcaciones que poco tienen que envidiar a un hotel cinco estrellas. Y este 2025 no ha sido la excepción.

En los últimos días, navegantes y bañistas se han visto sorprendidos por la presencia de uno de los conjuntos náuticos más impresionantes que pueden encontrarse hoy en el Mediterráneo: un megayate de cien metros de eslora acompañado de un lujoso yate de apoyo, que supera los 68 metros y dispone, entre otras comodidades, de helipuerto propio. Propiedad, ambos, de Jan Koum, el multimillonario cofundador de WhatsApp, una de las cien fortunas principales de Estados Unidos.

La escena no pasó desapercibida: desde otras embarcaciones cercanas y desde la costa se pudo ver cómo varios pasajeros accedían a bordo de un helicóptero que despegó desde la cubierta del yate secundario, atrayendo la mirada de todo aquel que se encontraba en la zona. La combinación de tecnología, lujo y diseño convertía al conjunto en un verdadero espectáculo marítimo.

El turismo de alto poder adquisitivo

Estas embarcaciones son mucho más que simples medios de transporte. Los megayates que visitan las Pitiusas en verano son auténticas residencias flotantes, equipadas con instalaciones de ocio de primer nivel: gimnasios, spas, cines privados, suites con vistas al mar, helipuertos y, en algunos casos, incluso sistemas de propulsión híbrida que minimizan el impacto ambiental de sus desplazamientos.

El barco principal, que supera los 100 metros de largo y los 16 metros de ancho, puede alojar cómodamente a más de una decena de invitados y cuenta con una tripulación compuesta por más de 30 personas.

Cada detalle ha sido diseñado para ofrecer una experiencia de navegación completamente personalizada, y su presencia en aguas españolas representa también un termómetro del nivel de atracción que ejercen las Baleares entre la élite mundial.

Una inversión multimillonaria

Aunque el precio exacto de estas embarcaciones varía según su equipamiento y configuración, se estima que el conjunto navega con un valor superior a los 260 millones de euros. Solo el yate de apoyo, una embarcación construida con líneas modernas, materiales de alto rendimiento y gran autonomía, habría supuesto una inversión cercana a los 40 millones.

El megayate principal fue adquirido hace tan solo unos años por el empresario tecnológico con residencia en Estados Unidos. Desde entonces, su presencia en los mares se ha vuelto habitual durante los meses de verano, aunque siempre envuelta en discreción y privacidad.

Impacto y atracción visual

Más allá de su valor económico, la presencia de estas embarcaciones genera inevitablemente un impacto en quienes las observan. La combinación de diseño náutico de vanguardia, lujo sin restricciones y despliegue tecnológico convierte a estos barcos en protagonistas del verano pitiuso. No solo atraen miradas curiosas, sino también a un turismo que busca exclusividad, tranquilidad y anonimato en un entorno natural privilegiado.

Ibiza y Formentera se consolidan así como enclaves preferidos para la navegación de alto nivel, una tendencia que no ha dejado de crecer en los últimos años y que confirma el papel de Baleares como punto de referencia para el turismo náutico de lujo en el Mediterráneo.