Naturaleza

Playas sin cobertura en Baleares: los paraísos escondidos en las islas para conseguir desconectar

Cada una de las islas tiene playas que se mantienen casi intactas a la masificación turística

Playas sin cobertura en Baleares: los paraísos escondidos en las islas para conseguir desconectar
Playas sin cobertura en Baleares: los paraísos escondidos en las islas para conseguir desconectarGoogle Maps

En Baleares aún existen rincones donde la señal del móvil desaparece y el único sonido que se impone es el de las olas del mar. Las playas sin cobertura se han convertido en pequeños refugios para quienes buscan unas vacaciones con una auténtica desconexión.

Cala en Baster (Formentera)

Una de las más conocidas por su aislamiento es Cala en Baster, en Formentera. Situada al nordeste de la isla, esta cala rocosa y poco frecuentada carece de cobertura móvil en buena parte de su extensión. Aunque no es una playa de arena al uso, su encanto radica en sus acantilados, cuevas naturales y aguas cristalinas, perfectas para practicar snorkel. Sin bares ni servicios alrededor, es el sitio ideal para quienes buscan paz absoluta y una desconexión digital total.

Cala Marmols (Mallorca)

En Mallorca, uno de los grandes tesoros es Cala Marmols, en la costa sur de la isla. Solo se puede acceder a pie tras una caminata de casi una hora desde el faro de Ses Salines, lo que garantiza su escasa afluencia. El hecho de que no haya ni una ralla de cobertura ni en la cala ni tampoco cerca de ella, se ha convertido en su principal atractivo. El esfuerzo por llegar se ve recompensado con un entorno virgen de aguas turquesas y arena blanca.

Cala Figuera (Mallorca)

También en la isla mayor encontramos Cala Figuera, en la península de Formentor. No debe confundirse con el pueblo homónimo del sureste de Mallorca. Esta cala, de difícil acceso y completamente natural, ofrece un entorno salvaje y sin señal. Ideal para quienes quieren pasar unas horas sin mirar el WhatsApp y conectar con el paisaje montañoso que la rodea.

Cala Trebalúger (Menorca)

En Menorca, otra joya sin cobertura es Cala Trebalúger, en la costa sur. Rodeada de pinos y con una arena blanca finísima, es accesible solo a pie o en barco. El camino desde Cala Mitjana dura unos 40 minutos, y el esfuerzo tiene su recompensa: aguas tranquilas, un entorno virgen y cero distracciones digitales. Allí, los visitantes disfrutan del silencio solo roto por el canto de las cigarras o el vaivén del mar.

Es Portitxol (Ibiza)

En la isla de Ibiza, aunque parezca imposible encontrar espacios sin conexión, aún existen algunos como Es Portitxol, una pequeña cala rodeada de montañas donde la conexión brilla por su ausencia. Se accede tras una caminata desde la urbanización de Sant Miquel y es habitual encontrar en ella a senderistas o residentes que buscan alejarse del bullicio estival.

Caló d'es Mort (Formentera)

Otras de las calas sin cobertura en Formentera, pese a su reducido tamaño, es Caló d'es Mort, una diminuta cala al sur de la isla, cerca de la famosa playa de Migjorn. Aunque en temporada alta puede haber cierta afluencia, la cobertura móvil es muy limitada y la tranquilidad del entorno permite desconectar por completo. Es un lugar perfecto para dejar el móvil en la mochila y perder la noción del tiempo entre aguas transparentes y rocas cálidas.

Estas playas sin cobertura no son solo destinos turísticos, sino verdaderos espacios de descanso mental. En un mundo donde cada vez es más difícil librarse de la tecnología, elegir unas vacaciones con el teléfono en modo avión puede ser un verdadero lujo.