Page reconoce que la ley de amnistía es mala y dice ser incapaz de sentirse orgulloso de un chantaje

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, durante su intervención en el acto institucional con motivo del 8M celebrado este viernes, ha considerado que: "La Ley de Amnistía es una mala ley" porque "el delincuente no puede exigir que se considere la democracia un sistema opresor".

Además, Page ha reconocido ser "incapaz" de sentirse orgulloso de "un chantaje" porque "gobernar es poder cumplir, hacer lo contrario no lo llamaría yo gobernar", ha señalado.

"No podemos dejar pasar lo que ha pasado desde el 78 para acá como un fracaso. Este es un país que tiene una Constitución y un metabolismo enormemente generoso, incluso, con quien le insulta, le increpa, le zarandea y los que quieren acabar con nuestro modelo de vida", ha manifestado el presidente del ejecutivo regional.

"Esto no vale, se parte de una premisa tan falsa como que el delincuente exige que el propio país y la Constitución se reconozcan a sí mismos como un problema", ha incidido.

"Hasta se van a terminar equivocando" y que, "por mucho que algunos den saltos de alegría", los procesamientos van a seguir. Eso se va a ver, espero, que no tardando mucho", ha manifestado el presidente regional.

Por todo ello, García-Page ha defendido el sistema democrático español ante los "radicales" y "antisistema" que no está en España. "Defender lo que tenemos es, a mi juicio, enormemente importante y tenemos que saber que entre nosotros han dado la cara gente y partidos en estos últimos años que nos recuerdan permanentemente que esta flor hay que seguir regándola", ha añadido.

Así mismo, Page ha destacado la existencia de gente "especialista" en crear problemas donde no los hay para "poder buscar soluciones que no son las necesarias". "Ese populismo finalmente no puede traer nada bueno", ha concluido.