Castilla y León
Destacan la labor del Tercer Sector de Castilla y Léon para atender a los más vulnerables durante la pandemia
El I Foro Social Grupo de Enlace del CES apuesta por el consenso para paliar la crisis provocada por la Covid-19
El I Foro Social del Grupo de Enlace del Consejo Económico y Social (CES) de Castilla y León destacó la aportación del Tercer Sector durante la pandemia del coronavirus para atender a las personas más vulnerables y en riesgo de exclusión social y apostó por el consenso y la colaboración, en el seno del Diálogo Social, para superar la crisis económica y social provocada por la Covid-19.
El presidente del CES, Enrique Cabero, fue el encargado de dar la bienvenida a los participantes del encuentro, que por las circunstancias sanitarias se desarrolló de forma virtual y que llevó por título “Superación de la crisis ocasionada por la pandemia de la Covid-19”. Durante su intervención consideró necesario abordar la “importante” labor realizada por las organizaciones del tercer sector social a la hora de hacer frente al coronavirus.
Asimismo, indicó que, en un momento muy difícil, han realizado una actividad “extraordinaria”, “muy eficaz”, “solidaria” y capaz de unir esfuerzos para ayudar a los más necesitados y evitar la exclusión, la pobreza y conseguir una igualdad y libertad real y efectiva, tal y como recoge la Constitución Española.
Enrique Cabero afirmó que este primer foro del grupo de enlace debe servir también para formular propuestas y valorar las lecciones que ha dejado, hasta el momento, la pandemia así como analizar lo que se ha hecho bien y mal. También, señaló que los poderes públicos deben articular medidas extraordinarias, algunas ya en marcha y otras que deberán ser aprobadas en los próximos meses, para que nadie quede excluido de la sociedad.
En este sentido, el presidente del CES añadió que la sociedad civil organizada y el tercer sector se han convertido en un instrumento “fundamental”, que deben ser respaldados por los poderes públicos y ayudado por la ciudadanía.
Tras la bienvenida, el presidente de las Cortes de Castilla y León, Luis Fuentes, fue el encargado de inaugurar la jornada, y en su ponencia reconoció que la agenda ha sido “tristemente golpeada” por los importantes problemas y las graves consecuencias que la crisis del Covid ha causado en las vidas de todas las personas. De ahí que resaltara el acierto del CES en la organización de unas jornadas, lo que demuestra la vigencia de la tarea institucional del órgano y su capacidad de análisis y anticipación que es “tan necesaria”, a día de hoy. “Como institución propia cumple con el objetivo de adelantarse a los retos que la situación socioeconómico nos plantea en cada momento”, subrayó.
Fuentes valoró la labor del grupo enlace que constituye el denominado tercer sector aunque aseguró que es el “primero de todos” al estar integrado por la sociedad “luchadora” y “enérgica”. A su juicio, el trabajo de las entidades del tercer sector obliga a estar a su lado hasta que el punto que precisó que son uno de los “motores básicos” para la recuperación presente y también de la solución futura. “Tomaremos nota de vuestras aportaciones para ejercer, con firmeza, el mandato comprometido que nos exigís”, declaró.
Por su parte, la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, también coincidió en la idea de que la pandemia había tenido un “tremendo impacto” en la vida de todos los ciudadanos. “Nadie es ajeno de lo que ocurre desde hace meses y nadie se libra de las consecuencias”, apuntó. Además, aseguró que se desconocen las consecuencias de la pandemia a corto y medio plazo, aunque una cosa cierta es que las personas más vulnerables como los mayores, con discapacidad, menores y los que sufren la exclusión social son ya los más perjudicados al enfrentarse a situaciones “desconocidas” y “más complicadas” por la falta de recursos.
Y es que Blanco precisó que la Covid-19 no solo provoca enfermedades, muertes y personas más dependientes con secuelas físicas y psíquicas sino que también afecta al bienestar de la sociedad. “Esta pandemia destruye los medios de subsistencia de millones de familias en todo el mundo, generando más pobreza, algo que es extrapolable a España y Castilla y León”, añadió.
Ante esta situación, la responsable regional de la cartera de Familia e Igualdad de Oportunidades explicó las actuaciones llevadas a cabo por la Junta para “paliar” estas consecuencias. Al respecto, se refirió al trabajo, desde el “minuto cero”, del departamento que dirige y los Servicios Sociales tanto en la prevención de la salud y de los contagios de las personas más débiles y en los cuidados de los que ya eran muy dependientes y tenían condiciones de especial vulnerabilidad como en el refuerzo de los sistemas de la red de protección a las familias.
No en vano, la consejera señaló que era necesario dar respuestas a las demandas que surgían a través de la Renta Garantizada de Ciudadanía y el complemento del Ingreso Mínimo Vital para que todas las familias vulnerables no entraran en una situación más precaria o de mayor vulnerabilidad.
Isabel Blanco también hizo referencia al trabajo de los Centros de Acción Social (CEAS) y las corporaciones que han gestionado las ayudas de emergencia y de urgente necesidad, gracias a los convenios de colaboración firmados con Cruz Roja, Cáritas y los bancos de alimentos. Entidades que, precisó, dieron la primera respuesta con la entrega de alimentos y productos de primera necesidad y con la atención diaria a las personas que se quedaron solas en la primera ola de la pandemia.
Asimismo, analizó las actuaciones aprobadas para mejorar la conciliación de la vida laboral y familiar, con una nueva línea de ayudas dotadas con más de tres millones de euros y los programas Conciliamos y Crecemos en verano para que los padres pudieran recuperar cierta normalidad y retomar sus trabajos. Por último, citó las organizaciones encargadas de la infancia para atender a los los menores con especial vulnerabilidad y cubrir todas sus necesidades.
“Orgullosos” de los Servicios Sociales
Tras este repaso, la consejera de Familia subrayó que los castellanos y leoneses pueden sentirse “muy orgullos” de los Servicios Sociales de la Comunidad por que estuvieron muy presentes en los primeros momentos de la pandemia y ahora continúan ahí en la segunda ola. “Todo este trabajo lo llevamos a cabo todos juntos. Los Servicios Sociales no serían el referente nacional que son si faltara la Gerencia, las entidades locales, el tercer sector y sus asociaciones y los agentes económicos y sociales. Trabajando todos juntos de manera coordinada, con todo el esfuerzo y la ilusión, dando el 200 por ciento, por que los Servicios Sociales atienden, en el fondo, a personas”, confesó.
Además, Isabel Blanco aprovechó su intervención para animar a las entidades del tercer sector y los agentes sociales y económicos porque, apuntó, que vienen meses “difíciles”, por lo que hay que continuar con el trabajo donde prime la colaboración, el consenso y el acuerdo. “Si nos ayudamos unos a otros, ayudamos a las personas”, afirmó. Por último, apostó por ser imaginativos, reflexionar, aprender del pasado, poner soluciones encima de la mesa y tratar de anticiparse a las situaciones sobrevenidas.
Escuchar al Tercer Sector
El presidente de la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León (Cecale), Santiago Aparicio, aseguró que la voz del Tercer Sector es más necesaria que nunca para “enriquecer” la sociedad de la Comunidad. “El CES y Cecale siempre han escuchado vuestras propuestas y recomendaciones para así canalizarlas y trasladarlas a los poderes legislativos”, resaltó.
Aparicio indicó que la pandemia ha traído consigo momentos complicados por la situación excepcional que ha venido a tambalear el Estado del Bienestar. Eso sí, también consideró que ha mostrado las “grandes” fortalezas de Castilla y León. Entre ellas, citó, está la gran labor de las entidades sociales durante la pandemia, que se han esforzado para que que nadie se quedara atrás. “Nos jugamos mucho y si todos remamos en la misma dirección ponemos en valor las oportunidades que se abren en la Comunidad”, reconoció.
A su juicio, la aportación del Tercer Sector será “muy valiosa” para perfilar la situación económica, social y laboral de Castilla y León. “No nos podemos permitir no dar un dar paso adelante para que sean cada vez los recursos para mejorar la calidad de vida de las personas en situación de desigualdad”, subrayó. En este sentido, afirmó que los empresarios son muy conscientes y consecuentes de la realidad social y económica del país, por lo que abogó por “ir de la mano” para lograr la reconstrucción social.
En la misma línea el secretario autonómico de Comisiones Obreras (CCOO), Vicente Andrés, afirmó que la sociedad afronta un “momento histórico, trascendente y de cambios”, similar a acontecimientos mundiales como la primera revolución industrial, la II Guerra Mundial y la propia conformación de la Unión Europea. “Se desconocen las consecuencias de la pandemia en el ámbito social y económica se desconocen, pero sabemos que provocará un gran cambio social y de orden económico, además de dejar una profunda huella”, matizó.
Nuevo modelo
Ante este situación, Andrés abogó por “replantear” una reconstrucción del modelo económico y social en Castilla y León, en las que es necesaria la participación de las las organizaciones sociales, económicas y sindicales. Expuso que la pandemia traerá cambios “positivos” como el cambio de modelo de producción (digitalización y empleo verde,) pero también consecuencias “negativas” para la salud y la pobreza.
El líder de CCOO también defendió la necesidad de contar con las aportaciones “indispensables” del tercer sector al recordar que la solidaridad es un elemento básico para afrontar la salida de la crisis social y el nuevo momento económico. En este sentido, recordó que el último Pleno del CES planteó la posibilidad de abrir el órgano a más organizaciones sociales como el tercer sector. “El CES se creó en el marco del Diálogo Social hace 30 años con una realidad social determinada y ahora hay otra. Ahora, el tercer sector tiene un peso específico y está más organizado”, subrayó.
Por último, el secretario general de UGT Castilla y León, Faustino Temprano, priorizó la salida de la crisis sanitaria a la económica y social, por lo que consideró que, mientras continúe la pandemia, hay que cumplir las decisiones adoptadas por las autoridades sanitarias.
En cuanto a la crisis económica y social, el líder sindical apostó por mantener los empleos y las empresas así como dar la cobertura necesaria a las políticas sociales para no dejar a ninguna persona atrás. En su opinión, el Diálogo Social es el instrumento necesario e imprescindible en España y Castilla y León, a través de la negociación, la concertación y alcanzar acuerdos. “No es un instrumento de las partes que negocian sino de los propios ciudadanos al servicio de ellos mismos para hacer más fácil la situación de crisis”, puntualizó.
Temprano demandó un plan de choque con medidas para trabajadores, autónomos y empresas pero también para el conjunto de los ciudadanos para ayudar que la crisis sea mucho “más llevadera”. También apostó por aprovechar la crisis, originada por la pandemia, para cambiar el modelo económico en Castilla y León y que la industria sea el motor de la economía y con mayor peso que el sector servicios.
Por otro lado, consideró que la salida de la crisis no puede pasar por recortes y las recetas de 2008 sino por apostar por el Estado del Bienestar como la sanidad, la educación y los servicios sociales públicos. También, reclamó aprovechar los fondos económicos que llegarán de Europa, que deberían ser consensuados con el Diálogo Social, para apoyar proyectos serios que beneficien al conjunto de la sociedad. “No podemos tirar el dinero”, sentenció.
“Los ciudadanos nos piden que es hora de hacer propuestas y llegar a acuerdos y ver el vaso medio lleno. Nuestra obligación es pensar en las personas y las familias que lo pasan mal por la crisis sanitaria y económica”, concluyó.