Los 190 trabajadores de Siro en Venta de Baños fían su futuro a la mediación de la Junta

Complicado momento el que están viviendo los 190 trabajadores de la factoría del Grupo Siro en la localidad palentina de Venta de Baños, cuyo empleo está más en el aire que nunca ante la crisis que atraviesa la compañía, con una deuda de 300 millones de euros, y que ha propuesto a sus empleados bajarles el sueldo y aumentar la jornada laboral.

Los representantes del comité de empresa, con Mónica de la Sierra a la cabeza se han reunido este martes con el secretario regional del PSOE, Luis Tudanca, para trasladarle la inquietud existente entre los trabajadores ante la situación actual de crisis y ante los últimos movimientos del Grupo Siro para intentar dar entrada en el accionariado al fondo norteamericano Davidson Kempner y del turno Afendis.

“La planta de Venta de Baños está en una grave situación pero no es por culpa de los 190 trabajadores sino de una mala gestión empresarial”, decía De la Sierra, quien aseguraba que en estos momentos, tal y como están las cosas, fían su futuro a la mediación que pueda hacer el Gobierno de Fernández Mañueco al respecto, al que han pedido una reunión al igual que al del Grupo Siro, Juan Manuel González Serna, de momento sin éxito ninguna de las dos, para intentar buscar alternativas de futuro.

Tudanca mostraba su apoyo y el del PSOE a los trabajadores y se comprometía con ellos a trabajar en las Cortes con iniciativas para lograr el respaldo del resto de grupos y pedía a la Junta “que haga todo lo que esté en su mano” para salvar también el empleo de estas 190 personas y evitar otro “mazazo” a la localidad de Venta de Baños, que ya ha sufrido golpes hace años como el de la azucarera.

“Tienen toda nuestra ayuda”, les decía el líder socialista a los responsables del Gobierno de Mañueco para que haya los acuerdos “lleguen a buen puerto” entre los trabajadores y la empresa.

El líder del PSOE aseguraba que confía y desea que la Junta se involucre y contribuya a ser parte de la solución, “como ha hecho el Ministerio de Industria”, decía, porque los trabajadores “no son parte del problema” y no han llevado a la empresa a esta situación. Además, destacaba que han hecho una “firme” reivindicación de sus empleos y de la voluntad de llegar a un acuerdo, como lo han demostrado en 40 años, con una “absoluta responsabilidad”. “Lo han hecho siempre, y ahora lo van a volver hacer, estoy convencido”, apuntaba.

Tudanca insistía en que el Grupo Siro, que cuenta con otras tres fábricas en la Comunidad y suma en conjunto los 1.400 empleos, es una “empresa señera” para Castilla y León, que tiene un componente “simbólico”, y que atraviesa “meses de mucha incertidumbre” porque “ven peligrar su futuro”, por lo que insistía en que deben operar los mismos mecanismos que hubo en otras crisis industriales previas.

Pese a los problemas en Venta de Baños, en los últimos días la factoría de Aguilar de Campoo, de la misma empresa, ha llegado a un preacuerdo, ratificado el pasado fin de semana por la asamblea de trabajadores que mantiene la mayor parte de las condiciones del convenio y “dista bastante del plan de competitividad que nos presentó la empresa en el mes de diciembre”, según ha explicado el presidente del comité de empresa, Alfredo Alonso, en declaraciones recogidas por Efe.

En concreto, los trabajadores de Aguilar han logrado mantener todos los derechos del anterior convenio y que la rebaja salarial del 30 por ciento que proponía Cerealto Siro en su plan de competitividad se quede entre el 1 y el 3 por ciento, además de garantizar todo el empleo y el compromiso de un incremento salarial moderado en el futuro, que deja atrás la propuesta de congelación salarial.

El pasado mes de diciembre, Cerealto Siro anunció que había optado por Biscuits International como su socio inversor,sin embargo, serán finalmente Davidson Kempner y Afendis los que entrarán en su accionariado, decisión que ha contado con el visto bueno de los bancos acreedores del grupo y de su principal cliente, Mercadona.