Apuesta de la Junta por la inclusión laboral, la innovación y la formación

La consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, junto a la presidenta y el director general de Fundación Personas, Ángeles García y Daniel Clavero, ha inaugurado hoy las instalaciones el nuevo Centro de Fabricación Aditiva Social que el Centro Especial de Empleo (CEE) Grupo Lince pone en marcha en Valladolid, con el apoyo económico de la Junta de Castilla y León, a través de los programas de Industria 4.0, financiación de inversiones en CEE y formación con compromiso de contratación.

El nuevo espacio, ubicado en un entorno industrial cercano a la factoría de Renault, consta de dos secciones: el Centro de Fabricación Aditiva Social (FAS), donde se producen trabajos mediante tecnología aditiva industrial, y el Centro de Entrenamiento y Producción Interconectado (EPIC CENTER), donde se forman profesionales con discapacidad para realizar trabajos vinculados a entornos industriales. El centro cuenta con más de 1500 metros cuadrados, 20 boxes de formación y producción y tecnología para una supervisión en remoto.

García, que ha estado acompañada de la directora general de Economía Social y Autónomos, Emma Fernández, ha felicitado al Grupo Lince y a su entidad matriz, Fundación Personas, por este proyecto que ha sabido integrar y aprovechar las sinergias de los distintos programas desplegados por la Consejería para apoyar las inversiones, el desarrollo tecnológico, la formación y el empleo de las personas con discapacidad.

En este sentido, el proyecto ha contado con ayudas a través de los programas destinados a financiar inversiones en el mercado protegido de trabajo y a financiar proyectos de Industria 4.0, lo que ha permitido subvencionar buena parte del equipamiento y la maquinaria, incorporando soluciones innovadoras de fabricación aditiva (proceso producción industrial también conocido como de impresión 3D) y tecnología para supervisión en remoto.

Además, a través de las ayudas de formación profesional especifica con compromiso de contratación, Grupo Lince ha formado a más de 50 trabajadores en módulos específicos de impresión 3D. Finalmente, como Centro Especial de Empleo, también cuenta con el apoyo económico de la Junta para financiar los costes salariales de las personas con discapacidad y de sus Unidades de Apoyo.

Un modelo de trabajo que constituye todo un referente y que ha permitido desarrollar un proyecto que ejemplifica la capacidad de los CEE para aportar valor económico e innovación a la actividad productiva de Castilla y León, así como valor social mediante la inclusión laboral, efectiva y real de personas con discapacidad en el sector industrial.

Durante la inauguración, la consejera ha señalado que, además de ser un referente nacional en la atención y la inclusión laboral de las personas con discapacidad, con su línea de fabricación industrial, Grupo Lince ha demostrado que la innovación y la capacidad de uso de los avances tecnológicos están al alcance de cualquier empresa y de cualquier trabajador motivado y formado para ello, sin prejuicios, sin estigmas y sin limitaciones.

En este sentido, ha invitado a las numerosas empresas y entidades que han asistido a la inauguración a contar con los servicios de los CEE y ha recordado que los trabajadores con discapacidad del CFAS, entre otros productos, fabrican piezas para sectores tan exclusivos como son el sector de la automoción y el aeroespacial.

Grupo Lince es el CEE con mayor plantilla de Castilla y León, con más de 750 trabajadores, el 90 % con discapacidad. En el último año ha contado con casi 6 millones de euros de ayudas por parte de la Consejería de Industria Comercio y Empleo. El CEE forma parte de Fundación Personas, organización que cuenta con más de 100 centros operativos en 30 municipios y cinco provincias de la Comunidad.

García ha subrayado que la Junta de Castilla y León está especialmente comprometida con estas entidades de la Economía Social que emplean a más 6.300 personas con discapacidad en el territorio autonómico, en una apuesta clara por la igualdad. Este compromiso se traduce en un incremento presupuestario de casi el 47 % en las ayudas en lo que va de legislatura, pasando de los 23,5 millones de euros anuales a los 34,8 millones.