La Junta da la cara por los sanitarios: "Jamás les estaremos lo suficientemente agradecidos"

El Colegio de Médicos de Burgos ha generado un profundo malestar entre los profesionales de la Sanidad, en general, y de la provincia de Burgos, en particular, después del duro comunicado que ha lanzado esta semana culpando a los sanitarios, entre otras cosas, de un «exceso de muerte en soledad» en la pandemia y recordando que los enfermos también existen los fines de semana y festivos. Un texto que ha indignado a los médicos de Burgos que piden dimisiones.

Preguntado por este asunto, el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, daba la cara por los médicos, se mostraba orgulloso de su calidad y humanidad, y destacaba su compromiso «que va más allá de lo profesional».

Además, desde la Consejería de Sanidad han enviado un comunicado en el que muestran su "absoluto apoyo" a los médicos y al resto del personal sanitario y no sanitario de Burgos y del resto de Castilla y León.

"Jamás les estaremos lo suficientemente agradecidos por la inmensa labor que hicieron durante la época más dura de la pandemia y los meses posteriores", señala el documento del departamento que dirige Alejandro Vázquez, en el que, además, apuntan que las medidas que se tomaron fueron, en cada momento, acorde con la información de la que se iba disponiendo, no sólo para proteger a los pacientes sino también a nuestros propios profesionales.

Desde la Consejería, además, destacan que durante la crisis sanitaria del coronavirus siempre se tuvieron en cuenta las medidas de humanización para afrontar una situación complicada para los profesionales sanitarios, los pacientes y sus familiares. Esa humanización no podría haberse llevado a cabo sin el importante ejercicio de humanidad que tuvieron en todo momento nuestros profesionales de Sacyl.

Para el consejero de Sanidad "nunca habrá agradecimiento suficiente" por el trabajo encomiable, el esfuerzo y el sacrificio, que algunos pagaron con su vida, durante estos tres últimos años.

Durísimo comunicado

Entre las perlas que dejaba el comunicado oficial que lanzaba el Colegio de Médicos de Burgos se encontraba esta: "Las diferentes normas y procedimientos a seguir, elaboradas por las instituciones sanitarias con motivo de la epidemia de Covid, han permitido por parte de los profesionales sanitarios conductas inflexibles e inclementes, muy cuestionables deontológicamente, fundamentalmente en el aspecto humano de la asistencia".

O esta otra: "Aunque estaba contemplado el acompañamiento del paciente moribundo, el excesivo rigor por parte del profesional sanitario en la interpretación de los diferentes normas elaborado por cada institución, ha provocado lo que se puede considerar un exceso de muertes en soledad y consecuentemente un importante sufrimiento a sus familiares".

Otro de los párrafos dice lo siguiente: "Esta Comisión Deontológica considera que la falta de acompañamiento del paciente en las fases finales de su vida, se debería haber evitado mediante una actitud más comprensible y deontológica (humana) por parte de las instituciones sanitarias y sus profesionales y de acuerdo a los protocolos establecidos para la epidemia del Covid.

Y, para finalizar, recuerda la circular a los colegiados "que los enfermos también existen los fines de semana y festivos. Y en períodos con muchos días festivos (Navidades, Semana Santa, etc..) es lógico que se produzca un sentimiento de abandono, tanto del paciente como de sus familiares, si no se pasa visita médica diaria o al menos cada 48 horas".

Los sanitarios están que trinan y muy indignados y ya está movilizando para pedir la dimisión de la junta directiva en bloque.

Desde el Colegio de Médicos, viendo la repercusión que ha tenido este asunto, han reculado este jueves y han emitido otro documento en el que piden disculpas a los sanitarios. "Agradecemos y pedimos perdón a todos los profesionales sanitarios que con su desvelo y abnegación, se hayan podido sentir agraviados por nuestro escrito y manifestarles sinceramente que no era esa nuestra intención", señalan desde la Junta Directiva, desde donde apuntan que, "sin culpar ni juzgar a ningún compañero", explican que lo que querían trasladar es hacer repensar si las normas sanitarias deberían haber contemplado la excepcionalidad de las mismas y haber favorecido una despedida digna, en intimidad y acompañada de sus seres queridos.

En este segundo comunicado, aseguranque su intención con el citado escrito, "en ningún momento ha sido ofender ni menospreciar a ningún médico ni compañero". Y afirman que, si bien en él no se concretaba ninguna fase de la epidemia, "desde luego no se refería a lo sufrido durante el año 2020".

Y quieren resaltar también que el espíritu de la carta de la polémica no pretendía poner en duda la profesionalidad de los compañeros que estuvieron en primera línea "a los que reconocemos su inmenso trabajo en una situación muy dura", finaliza.