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El pueblo de Castilla y León que ya no quiere ser gallego

Que la deseada mejora en la carretera de acceso al municipio haya superado ya la tramitación ambiental, entre los motivos

Imagen de Fuente de Oliva, en la comarca de El Bierzo
Imagen de Fuente de Oliva, en la comarca de El BierzoLa RazónLa Razón

Hace casi tres años, en noviembre de 2020, los vecinos de Fuente de Oliva, una pedanía del municipio leonés de Balboa, en plena comarca de El Bierzo, hartos de ser ninguneados y molestos por el "abandono" que decían sentir por parte de las Administraciones de la Comunidad, tanto de la Junta de Castilla y León como la Diputación de León, a cuenta la promesa que nunca llegaba del asfaltado de una carretera de tres kilómetros de acceso a la localidad y para comunicarse con los pueblos más cercanos como son Castañeiras y el Portelo; que no se ayudará económicamente con 10.000 euros desde el Instituto Leonés de la Lengua a la rehabilitación del emblemático y centenario hórreo, en peligro de derrumbe; la falta de conectividad y la escasa atención sanitaria; o la ausencia de políticas de desarrollo rural, amenazaban con marcharse a la vecina Comunidad gallega, y más en concreto a la vecina localidad lucense de Cervantes, de la que la separa apenas un kilómetro de distancia, y con la que aseguraban recibir más cariño.

«Vivimos literalmente de los os problemas da España vaciada y necesitamos que nos enchufen, que nos presenten proyectos que pongan en valor las aldeas de montaña», decía por aquel entonces el alcalde pedáneo de Fuente de Oliva, Fernando Cerezales, mientras se quejaba, en el caso de la carretera, de los problemas que sufren cuando hace mal tiempo ya que con las lluvias o las nieves de invierna corren el riesgo de quedar incomunicados.

La amenaza saltó a los medios de comunicación nacionales, como no podía ser de otra manera, y desde el Gobierno gallego, entonces dirigido por el actual líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, no se hacía asco a este asunto, más bien al contrario ya que se acogió con simpatía incluso, aunque poco después la Junta de Castilla y León ya se encargó de cortar de raíz apelando a la Ley. "La Ley no entiende de simpatías o antipatías", llegó a decir el que era entonces consejero de la Presidencia de la Junta, Ángel Ibáñez.

En Fuente de Oliva viven apenas un puñado de vecinos, aunque hubo tiempos en lo que residían y trabajaban una treintena, que podían vivir de la ganadería y de una agricultura variada. Una localidad que habla castellano y gallego. Junto con la localidad de Castañeiras compone una Junta Vecinal que en 2021 contaba con doce habitantes censados.

Un pueblo también que volvía a saltar a la palestra de la información nacional después de su intentona por acoger la Agencia Espacial Española -sede que finalmente se ha quedado Sevilla-, de la mano de la Fundación de la Ciudad de la Energía "Ciuden" de Ponferrada.

¿Los motivos? Pues, sobre todo, disponer de un cielo sin contaminación lumínica además de terrenos disponibles descomunales e impulsar la descentralización y el desarrollo de las zonas despobladas, que era uno de los objetivos de la convocatoria, algo que por cierto no cumple la capital andaluza, lo que ha generado polémica

Imagen de la pedanía Fuente de Oliva, perteneciente a la localidad berciana de Balboa, que quiere integrarse en el municipio gallego de Cervantes
Imagen de la pedanía Fuente de Oliva, perteneciente a la localidad berciana de Balboa, que quiere integrarse en el municipio gallego de CervantesLa RazónLa Razón

Pere hete aquí que ahora la situación ya no es la misma que en noviembre del año 2020, en plena pandemia, ya que el alcalde pedáneo valora positivamente el esfuerzo que se está haciendo desde la Diputación de León, que preside el socialista Eduardo Morán.

"Está cumpliendo con el proyecto de mejora de acceso al pueblo y ya se ha superado la tramitación ambiental", decía recientemente Cerezales en una entrevista en la Ser, de la que se deduce entonces que este pueblo limítrofe con Galicia, ya no está harto de cómo les tratan en Castilla y León, que sienten que les atienden más y mejor y con cariño, y que por lo tanto sus vecinos ya no quieren ser gallegos.

El caso es que, además, Morán le ha convencido para que sea candidato por el partido del puño y la rosa en estas próximas elecciones municipales del 28 de mayo para intentar ser alcalde de Balboa, localidad a la que pertenece Fuente de Oliva y otras dieciséis pedanías más, y medirse contra el popular Juan José López.

Lo hará como independiente, ya que no reniega de su pasado como tal en la formación política Municipalistas por el Cambio, aunque ahora se ponga la camiseta roja del PSOE para defender a sus paisanos.