Desescalada

Cerradas cuatro playas de Barcelona por exceso de aforo

El primer fin de semana de baño permitido en la capital catalana se salda con un lleno absoluto

Como ya ocurriera en cada fase de la desescalada, en Barcelona, cada vez que das la mano te cogen el brazo. Ocurrió con los gimnasios al aire libre o con el día que abrieron las playas para el paseo. El Ayuntamiento, consciente de la situación que se podía generar este fin de semana llevaba semanas avisando. Hasta había preparado un app que daba cuenta del aforo en tiempo real. De poco ha servido. La avalancha de bañistas ha sido tal que el gobierno municipal ha tenido que cerrar cuatro playas de la capital catalana. De las cinco restantes, una estaba cerrada por la mala calidad del agua y las otras cuatro, al 80% de su capacidad.

Fuentes del Ayuntamiento han asegurado a Efe que en el momento en que los videosensores han detectado que se alcanzaba un nivel de ocupación muy alto, se ha informado a los bañistas por megafonía de la situación, en colaboración con los informadores desplegados por el litoral, y se ha pedido su colaboración para repartirse por la playa respetando las distancias de seguridad. De poco ha servido. Así, por primera vez se han cerrado los accesos en estos puntos y se han formado colas de gente con la intención de acceder a la arena. Incluso se han producido situaciones nunca vistas: ciudadanos que habían marchado un rato de la playa y que, a pesar de tener el grupo de amigos y todas las pertenencias dentro, no se les ha sido permitido volver. De hecho, en el caso de la playa de la Nova Icària sólo hay dos puntos de acceso y los informadores, a pesar de las vallas, no han dado abasto para gestionar la avalancha de personas que intenta llegar al mar.

Desde que Barcelona entró en la fase 2, hace una semana, el mal tiempo ha sido la tónica más habitual, pero este sábado el sol ha hecho acto de presencia con todo su esplendor, y los barceloneses lo han aprovechado para ir a la playa. Durante la mañana se han podido respetar los dos metros de distancia de seguridad marcadas por las autoridades, pero se ha hecho más complicado a medida que avanzaba el día. Al mediodía, se ha comenzado a alertar por megafonía que se estaba sobrepasando el límite del aforo recomendado y han pedido a los bañistas trasladarse a otras playas más vacías.

A lo largo de esta semana se han instalado los 18 videosensores para calcular la ocupación de las playas. Los aparatos deben permitir dar información en tiempo real para garantizar las distancias de seguridad, tanto a los usuarios como al Ayuntamiento. Con esta información, si en algún momento se considera que se sobrepasa la capacidad adecuada para mantener la distancia de seguridad, el consistorio restringirá temporalmente el acceso con vallas. Además, los usuarios pueden remover consultar en todo momento en la web de playas de la ciudad la ocupación de cada zona.

Cuando está el indicador verde es que hay menos del 40% de ocupación; el amarillo, cuando está entre el 40 y el 60%, mientras que el naranja es cuando la ocupación ya se acerca al 80%. En este último caso, se recomienda ir a playas con menos afluencia de personas. Este sábado por la mañana, la mayoría de playas tenía la señal de color verde a primera hora pero al mediodía han pasado a color amarillo y algunas a naranja.