La Generalitat no declarará las librerías comercios esenciales

Desde que se declararon las nuevas restricciones en Cataluña por la actual situación sanitaria, las librerías han luchado por poder ser clasificadas como comercio esencial, hecho que permitiría que pudieran abrir aquellas que tienen menos de 400 metros cuadrados. En su momento, la consellera Àngels Ponsa se comprometió a salvar a las librerías, pero -una vez más- la conselleria ha demostrado que lo suyo solamente son palabras huecas.

El Gremi de Llibreters de Catalunya ha informado que, tras haber negociado hasta el último momento con el Govern la posibilidad de poder abrir los fines de semana, finalmente no ha sido así. A través de una nota, a la que ha tenido acceso este diario, los libreros catalanes han denunciado que sus establecimientos no tienen consideración de bien esencial, pese al acuerdo de la Generalitat sobre la esencialidad de la cultura, hecho que obliga a cerrar los fines de semana.

Por otro lado, según la normativa de la Generalitat, aquellos establecimientos con más de 400 metros cuadrados deberán cerrar cada día, por lo que no se permite la acotación de espacios, como se había interpretado hasta ahora.

Igualmente, los fines de semana deberán cerrar al público, hecho que provoca que no se puedan atender los encargos recibidos en línea mediante cita previa.

El Gremi explicó que la presidenta de la entidad, Maria Carme Ferrer, se ha reunido con responsables de la Generalitat hasta el viernes día 8. No ha habido suerte en estas negociaciones.

Por su parte, la Cambra del Llibre de Catalunya se siente totalmente decepcionada y engañada ante la resolución de la Generalitat y continuará luchando para que el libro mantenga el papel esencial en la vida de los ciudadanos.