Coronavirus

La cepa británica ya supone el 17% de los contagios en Cataluña

La Generalitat alcanza un acuerdo con las universidades para convertir los campus en centros de vacunación

Primeras vacunas contra la COVID-19 en la provincia de Burgos. Vacunación realizada en la Residencia de Personas Mayores Fuentes Blancas.
Primeras vacunas contra la COVID-19 en la provincia de Burgos. Vacunación realizada en la Residencia de Personas Mayores Fuentes Blancas.© Tomas Alonso©Tomás Alonso

La consellera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés, y el secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, visitaron ayer la planta que los laboratorios Reig Jofre en Sant Joan Despí. En esta planta se fabricará la vacuna desarrollada por Janssen Pharmaceutical, la filial belga de la estadounidense Johnson & Johnson. La consellera afirmó que se están cumpliendo los escenarios epidemiológicos y de ocupación asistencial para rebajar la incidencia de la tercera ola: «Podemos considerar que hemos pasado el pico».

«Por lo tanto, tenemos que ir con mucha prudencia de no tener en algún momento algún repunte que no signifique un cambio de tendencia», señaló. En cuanto a que se hayan suavizado las restricciones contra el coronavirus, aseguró que se han introducido «correcciones» porque no se pueden levantar de forma clara por la aún alta incidencia del virus. A pesar de todo, ya se ha detectado que la estimación de la cepa británica en Cataluña es del 17%. Es precisamente por este motivo que la disminución «la tenemos que mirar con cautela», señaló Argimon. Básicamente por la detección de las nuevas variantes y también, por ejemplo, las ventajas selectivas que tiene la cepa sudafricana con respecto a la variante británica. «Todo a nuestro alrededor está en situación de ebullición máxima, con mucha incidencia».

Los responsables de Salud, en otro orden de cosas, lamentaron la decisión del Ministerio de Sanidad de limitar a los 55 años la edad para recibir la vacuna contra la Covid-19 de Oxford-AstraZeneca. En concreto, Argimon afirmó que la decisión «complica mucho la logística» de la administración de las vacunas, porque hay colectivos esenciales a los que tendremos que poner dos vacunas diferentes según la edad: «Buena parte de los colectivos esenciales son colectivos que trabajan hasta los 65 años, y desde esta perspectiva tendremos que empezar a filtrar todo lo que hace referencia a esta franja de edad».

A pesar de ello, y según Vergés, el proceso de vacunación continuará igual, y sólo se cambiará el tipo de perfiles a los que se administra cada tipo de vacuna disponible: «La máxima es: dosis que llegue, dosis que nosotros administraremos. El tema en este caso es a quién se lo administramos si existe la posibilidad de hacerlo a personas hasta los 65 años o hasta los 55, pero nosotros evidentemente tenemos toda la maquinaria puesta en marcha para poder administrar todas las vacunas que nos vayan llegando».

En la comparecencia, Vergés aprovechó para anunciar que el viernes llamó a todos los rectores de las universidades catalanas, y que estos se han comprometido a participar en la estrategia de vacunación. La consellera precisó que esta participación será en la tercera etapa, cuando ya se esté vacunando la población en general, y añadió que los campus universitarios serán un buen lugar para facilitar la vacunación de la población joven: «El espacio universitario nos puede ayudar a vacunar a mucha gente al mismo tiempo. Esto significa que ya tendremos disponibilidad de dosis, y nos estaremos dirigiendo a esta población de personas jóvenes y que suelen estar sanas, y por tanto no tienen una relación con el sistema de salud equivalente a la gente mayor».

Reig Jofre llegó en diciembre a un acuerdo con Janssen Pharmaceutical para producir dosis de su vacuna contra la Covid-19. Esta planta tiene capacidad de producir hasta 250 millones de dosis de esta vacuna, que está pendiente de aprobación por parte de las autoridades sanitarias de EE UU y la UE. Esta vacuna la han desarrollado basándose en una vacuna previa contra el ébola, y está ultimando la fase 3 de los ensayos clínicos en humanos. El contrato firmado por Janssen con la UE supone un encargo de 400 millones de dosis de una vacuna que se ha demostrado menos eficaz que las ya aprobadas. En concreto, en los ensayos en los Estados Unidos han logrado una eficacia del 72%, pero en el cómputo global de los 44.000 voluntarios que se han prestado en 3 continentes, es del 66%. Parte de estos ensayos se han hecho desde diciembre a cuatro hospitales catalanes: el Clínico, Can Ruti, Vall d’Hebron y Quirón.