En Barcelona

Junqueras y Otegi se citan y condicionan su apoyo a Sánchez a avances en la “agenda nacional”

El líder de Esquerra advierte de que la evolución de la mesa de diálogo influye en la confianza sobre la Moncloa para lo que resta de legislatura

(I-D) El líder de ERC, Oriol Junqueras, y el coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, intervienen en una reunión en la sede de Esquerra Republicana de Catalunya, a 25 de febrero de 2022.
(I-D) El líder de ERC, Oriol Junqueras, y el coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, intervienen en una reunión en la sede de Esquerra Republicana de Catalunya, a 25 de febrero de 2022.David ZorrakinoEuropa Press

En un momento en que Pedro Sánchez da por encarrilada la legislatura pese a que todavía tiene votaciones importantes en el Congreso, el presidente del Gobierno ha enfriado sus relaciones con Esquerra y EH Bildu, sus socios prioritarios, y ha empezado a tratar de sortear los compromisos con ambas formaciones. Sin embargo, los independentistas tratan de hacerse valer lanzando advertencias, aunque sin elevar demasiado el tono, por el momento, para evitar una abrupta ruptura: “El Gobierno tiene la pelota en su tejado”, ha resumido este viernes Arnaldo Otegi, que se ha reunido con Oriol Junqueras en Barcelona para tratar de renovar la estrategia compartida que mantienen en el Congreso de los Diputados y para advertir al Gobierno de que, sin contrapartidas en materia “nacional”, tampoco habrá apoyo en Madrid.

Tanto Junqueras como Otegi han ahondado en la necesidad de mantener la vía negociada con el Estado para lograr la independencia de Cataluña y el País Vasco porque así lo ampara la comunidad internacional, según han aducido, aunque también se han mostrado críticos con el Gobierno. En este sentido, han advertido tanto a PSOE como Podemos de que, además de la agenda estatal en aspectos sociales y económicos, se debe atender “las agendas nacionales” que defienden los independentistas. Y, por ello, han querido poner el acento sobre lo decisivo del respaldo de la izquierda separatista para frenar la llegada de PP y Vox al Gobierno, por lo que han apremiado a Sánchez a satisfacer sus exigencias.

Si bien, también es cierto que Junqueras ha matizado que Vox tampoco “condiciona el posicionamiento político” de ERC, dejando claro que tampoco le pesara a su partido dejar caer al Gobierno pese a que el contexto electoral pueda ser favorable a la derecha. Y, en este sentido, ha dejado claro que el “clima de confianza” que haya entre Gobierno y ERC en función de los avances en la mesa de diálogo influirá en las relaciones, aunque tampoco será determinante y se ha reafirmado en la estrategia de Esquerra de ir paso a paso (negociación a negociación). “Votaremos a favor de todo aquello que se abueno para la ciudadanía catalana y en contra de aquello que sea malo para la ciudadanía catalana. Seguro que el clima de confianza es muy relevante para que la negociación sea efectiva. Es evidente que todo esta ligado en la vida”, ha señalado Junqueras.

Otegi, en la misma línea que Junqueras, ha evitado dinamitar la relación con el Gobierno, aunque ha querido dejar también sus advertencias. “EH Bildu tiene alguna virtud y una de esas es que decimos lo que hacemos y no tenemos ningún inconveniente en medir la votación en función de si se defienden los intereses de los trabajadores y de nuestro país. Hemos votado que no a la reforma laboral porque se ha incumplido el programa electoral y los acuerdos que se suscribieron”, ha señalado Otegi, que ha lamentado que el Gobierno no fuera más allá con la reforma del nuevo marco laboral.

Asimismo, aprovechando el conflicto Rusia-Ucrania, Junqueras no ha evitado trazar una comparación con el “procés”: en este sentido, ha asegurado que Cataluña sufre una “agresión exterior” por parte de un Estado que quiere imponerse, como ocurre con Ucrania y Rusia, y ha dicho que el “autoritarismo y la corrupción” del presidente ruso Vladímir Putin se parece al de “algunos partidos españoles”. Además, ha señalado que Ucrania estaría “encantada” de tener una mesa de negociación para solucionar el conflicto tras el ataque del ejército ruso.

Pero, según Junqueras, esta mesa de negociación no se produce porque “hay una agresión exterior por parte de un Estado que quiere imponerse y que está condicionado por sus tentaciones autoritarias internas”. “Pues en nuestro caso, tres cuartos de lo mismo”, ha afirmado en alusión a la mesa de diálogo entre la Generalitat y el Gobierno.