Manifestación

Pulso civil contra la amnistía en Barcelona: vuelve el 8-O

Societat Civil Catalana lidera una marcha con el PP volcado, además de Cs y Vox justo cuando Sánchez ya asume la despenalización del "procés"

Vista de la manifestación convocada por Societat Civil Catalana en 2017 en Barcelona en defensa de la unidad de España bajo el lema "¡Basta! Recuperemos la sensatez" y en la que se han participado miles de personas.
Vista de la manifestación convocada por Societat Civil Catalana en 2017 en Barcelona en defensa de la unidad de España bajo el lema "¡Basta! Recuperemos la sensatez" y en la que se han participado miles de personas. Marta PérezAgencia EFE

El constitucionalismo vuelve a la movilización seis años después de la gran manifestación contra el «procés» de 2017. Y lo hace en plenas negociaciones del independentismo para la investidura de Pedro Sánchez y con el presidente del Gobierno en funciones asumiendo ya abiertamente la amnistía.

De hecho, el rechazo a despenalizar el «procés» y el referéndum ilegal del 1-O devuelve al constitucionalismo a la calle, decidido a dar un paso al frente. Todo en una semana de alto voltaje político que culmina hoy en Barcelona de la mano de Societat Civil Catalana, con la presencia del PP, Vox y Ciudadanos y sin rastro de los socialistas, que sí estuvieron en la protesta de hace seis años.

Bajo el lema «No en mi nombre: ni amnistía ni autodeterminación», la dirección de la entidad ha defendido esta semana «dar voz a los ciudadanos catalanes y del resto de España que no están dispuestos a que sean objeto de negociación cuestiones que minarían» la Constitución. «La amnistía es demoledora para el estado democrático», confirma contundente Elda Mata, cabeza visible de la organización que hoy vuelve a la calle.

La movilización es a las 12:00 horas en el paseo de Gràcia con la calle Provença y la encabezarán la propia presidenta de SCC y el vicepresidente de SCC, Álex Ramos, junto a una treintena de entidades civiles.

En este sentido, el objetivo es poner el acento en la transversalidad del constitucionalismo con la llegada también de asistentes y asociaciones de otras comunidades autónomas. Así, el primer bloque está reservado a miembros de las organizaciones, mientras que los dirigentes políticos estarán en un segundo grupo. Aunque SCC no ha convocado oficialmente a los partidos y ha pedido una protesta sin siglas para liderar el constitucionalismo desde el ámbito civil, PP, Cs y Vox se volcarán en la concentración contra la amnistía. Por contra, el PSC no estará seis años después de haber acudido a la protesta del 8-O de 2017 con el actual ministro en funciones Miquel Iceta en primera fila. «Ahora no es el momento de salir a la calle», se limitó a decir Salvador Illa.

La comitiva la lidera el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que acude junto a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien ya ha llamado a la movilización en varias ocasiones. Además de Feijóo y Ayuso, del PP también están el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno; de la Región de Murcia, Fernando López Miras, y de Aragón, Jorge Azcón; el líder del PP en Castilla-La Mancha, Paco Núñez; el líder del PP catalán, Alejandro Fernández, y la secretaria general del PP, Cuca Gamarra. Una delegación importante, con los principales barones territoriales del partido y con Feijóo rodeado también de parte de su Comité de Dirección para dejar clara su oposición frontal a la amnistía antes de verse mañana con Sánchez.

De Vox acude su presidente, Santiago Abascal, junto al secretario general del partido y presidente del grupo en el Parlament, Ignacio Garriga, además de otros cargos. Y de Cs encabeza la comitiva el líder en el Parlament, Carlos Carrizosa, y el secretario general de Cs y jefe de la delegación de Cs Europa, Adrián Vázquez.

La concentración certifica el paso al frente del constitucionalismo contra la amnistía en Cataluña 48 horas antes de que Yolanda Díaz presente su propuesta también en Barcelona, según anunció este viernes. Sumar ha contado con una veintena de juristas liderados por el exdiputado Jaume Asens para preparar una propuesta de amnistía, que expondrá la dirigente el martes a las 19:00 horas en el Ateneu. La medida de gracia pretende eximir de responsabilidades penales a políticos y activistas independentistas por causas judiciales relacionadas con el «procés».

Sea como fuere, lo cierto es que la movilización de este 8-O supone un pulso contra la amnistía y un paso al frente del constitucionalismo civil en Cataluña, que vuelve a hacerse fuerte y a acaparar foco para clamar contra las exigencias del independentismo a Sánchez tras el 23J. De hecho, la fecha de hoy evoca directamente a la gran manifestación que hubo en 2017 organizada también por Societat Civil Catalana apenas cuatro días después del discurso del Rey a raíz del 1-O. Ahora, seis años después y con ERC y Junts exigiendo amnistía y autodeterminación a cambio de sus votos a Sánchez, la movilización vuelve a Barcelona.

Y lo hace entre críticas y reproches del Govern de Aragonès, quien ha cuestionado abiertamente la convocatoria de Societat Civil hasta el punto de llamarla «anticatalanista» por ir en contra de despenalizar el «procés», la exigencia que pide el independentismo al PSOE. «No es a favor de nada, sino, una vez más, en contra de los catalanes. Es un acto anticatalanista, queda claro quién lo convoca y quién ha confirmado su asistencia», aseguró la portavoz del Ejecutivo, Patrícia Plaja. Unas palabras que rápidamente fueron contestadas por la propia Elda Mata, quien recordó además que el presidente catalán nunca ha querido ni recibirles.