Día Internacional de las Enfermeras

"Vamos hacia la especialización de la enfermería"

El Hospital Vall d'Hebron ha apostado por un modelo de atención basado en la intensidad de los cuidados, lo cual garantiza que el personal de enfermería pueda destinar el tiempo y los recursos a cada paciente en función de sus necesidades, y en la especialización del personal de enfermería

Paco repasa con la enfermera Valme Rodríguez las pauta de medicación que ha de seguir
Paco repasa con la enfermera Valme Rodríguez las pauta de medicación que ha de seguirVall d'Hebron

Durante muchos años, el papel que desempeñan las profesionales de la enfermería en la atención sanitaria ha quedado difuminado y, por lo tanto, ha sido poco reconocido, sin embargo, a raíz de la pandemia, éste se ha puesto claramente de manifiesto y, desde entonces, ha arrancado un proceso de revalorización de esta figura profesional, que ha ido asociado a una apuesta por la especialización del colectivo, lo cual se refleja ya en los modelos asistenciales de hospitales y centros sanitarios, como el de la Vall d'Hebron.

"Nosotros trabajábamos antes por servicios", es decir que por ejemplo, todos aquellos pacientes afectados por una patología pulmonar, desde una neumonía hasta un trasplante, se encontraban hospitalizados en una misma planta y eran tratados por el mismo equipo, "sin embargo, ahora nos organizamos por áreas del conocimiento", explica Adela Amat, supervisora de enfermería del Área de Trasplante de órgano sólido de adulto, lo que se traduce en que, por ejemplo, en estos momentos, todos los pacientes trasplantados, independientemente del órgano que hayan recibido, son atendidos en la misma área, lo cual ha favorecido el despliegue de un modelo organizativo basado en la intensidad de los cuidados.

Nuevo modelo

Al respecto, Amat señala que "este nuevo modelo permite adaptar los recursos y el tiempo de las enfermeras a cada paciente en función de sus necesidades". "Antes funcionábamos por ratio y cada enfermera debía atender a x pacientes en función del pasillo que le tocaba, sin embargo, ahora podemos decidir cómo nos organizamos y valoramos la situación de cada una de las personas hospitalizadas para determinar cuántos pacientes lleva cada enfermera y así asegurarnos que cada uno de ellos recibe la atención que necesita", explica Amat.

Porque, evidentemente, no va a requerir el mismo grado de intensidad de cuidados ni la misma atención un paciente que acaba de dejar la UCI para subir a planta después de someterse a un trasplante que uno que está a punto de recibir el alta, por ejemplo. De manera que si una enfermera tiene bajo su cuidado a un paciente que requiere mucha atención por el elevado riesgo de complicaciones, a ésta probablemente se le asignará un menor número de pacientes para que pueda dedicar el tiempo y los recursos necesarios a cada uno de ellos.

En este sentido, cabe señalar que "las personas trasplantadas corren muchos riesgos, ya que pueden sufrir una infección, una trombosis, broncoaspiraciones...y, por lo tanto, hay que estar muy pendientes para evitar complicaciones", recuerda la supervisora y ello, con el anterior modelo, era complicado. Además, con este nuevo modelo de intensificación de los cuidados, las profesionales de la enfermería no solo pueden atender mejor a los pacientes en lo relativo a la prevención y detección precoz de complicaciones, sino que también tienen la posibilidad de desarrollar su faceta de educadoras sanitarias con mayores garantías.

Tiempo para educar

"En la mayor parte de los casos en los que se produce el rechazo del órgano es porque el paciente -que debe seguir un estricto plan de medicación con inmunosupresores para evitarlo- no hace de forma correcta el control de la enfermedad cuando llega a casa, por ello es muy importante que, mientras está hospitalizado, haya una persona que le acompañe en el proceso y le de toda la información acerca de los cuidados y pautas que ha de seguir a partir de ese momento para que pueda irse a casa con todo ese conocimiento interiorizado y sintiéndose seguro", explica Valme Rodríguez, enfermera especialista en cuidados del paciente trasplantado. Ahora, gracias a este nuevo modelo organizativo, "podemos dedicar el tiempo necesario a esa educación sanitaria y a explicar al paciente cuándo debe tomarse la medicación, la dosis correcta, qué hacer si la vomita...y eso es clave porque de ello depende el éxito del trasplante", añade.

Mayor especialización

Pero además, la organización del hospital por áreas de conocimiento se cimienta y a la vez promueve la especialización de los profesionales, lo que garantiza una mejor atención al paciente. "Es cierto que las complicaciones que puede sufrir un paciente dependen del tipo de trasplante y de la cirugía a la que se le ha sometido, pero todos tienen cosas en común y el hecho de tenderlos a todos en el mismo área de conocimiento da lugar a una atención más especializada", comenta Amat, quien al respecto indica que, en el contexto de la atención sanitaria, "vamos hacia la especialización de la enfermería". Al respecto, Valme Rodríguez recuerda que "el hecho de que todos los especialistas trabajen de forma conjunta en la misma área permite detectar las complicaciones y buscar soluciones de manera más fácil, porque todos hablamos el mismo lenguaje".

Pero la implementación de este nuevo modelo basado en la intensificación de los cuidados requiere un aumento de los recursos humanos disponibles, por lo que ésta ha ido acompañada de la contratación de 140 nuevas enfermeras, con las que Vall d'Hebron supera ya la cifra de las 3.000 trabajando en el hospital. En cualquier caso, ese refuerzo del personal permite ofrecer a los pacientes una mejor atención y más especializada, algo que ellos reconocen y agradecen, como es el caso de Francisco Agredano, Paco.

Seguridad y atención

Con 66 años y dos años después de serle diagnosticada una fibrosis pulmonar, el pasado 6 de abril se sometía al trasplante del pulmón derecho en Vall d'Hebron. Tras permanecer algunos días en la Unidad de Cuidados Intensivos y en la de Semicríticos, finalmente Paco subió a planta para continuar con su recuperación, pero sufrió una complicación. "Vimos un cuadro de saturación y, pese a que él no sufría síntomas de ningún tipo, se decidió hacerle las pruebas pertinentes y se observó que había sufrido un pequeño rechazo que, habitualmente, se puede controlar con antiinflamatorios, pero en su caso se sumó también un neumonía y todo ello le provocó un insuficiencia respiratoria", explica Valme Rodríguez.

Pese a que la complicación fue detectada a tiempo, hubo que ingresar de nuevo en la UCI a Paco, que fue entubado y sedado para favorecer su recuperación. A día de hoy ya está de nuevo en planta y su recuperación está siendo muy buena, de manera que todo parece indicar que no tardará en recibir el alta, eso sí, siempre y cuando pueda asumir él mismo todos los cuidados asociados a su nueva condición de trasplantado. "No se va nadie a casa si no tenemos claro que podrá tener un control de la situación", asegura Rodríguez, mientras que para Paco eso no supone un problema. "Ya podría cuidarme solo. Tengo muy claro todo lo de la mediación y por falta de información no será. Me han explicado y enseñado el tratamiento y, si es necesario, me repasan la lección todos los días", indica el paciente, quien asegura que, en Vall d'Hebron, ha recibido una "buena atención en todos los sentidos". "Cuando te sometes a un trasplante, es fundamental sentirse atendido en todo momento y saber que estás en buenas manos y yo he sentido esa especialización en todo momento"