Vox presenta una querella contra la EMT y su concejal Grezzi por fraccionamiento de contratos

La formación Vox ha presentado esta mañana ante el juzgado de instrucción una querella contra la Empresa Municipal de Transportes de Valencia y su presidente, Giuseppe Grezzi, por un presunto delito continuado de prevaricación administrativa en la adjudicación de los contratos de combustible, mantenimiento y repuestos, que suman cerca de 11,5 millones de euros, al realizar fraccionamientos indebidos y adjudicaciones directas, incumpliendo los principios básicos de la contratación pública.

En el documento presentado, que refleja los datos expuestos en el informe de Auditoría Externa, Vox acusa al presidente de la empresa de fraccionar contratos y adjudicarlos ‘a dedo’. Tal y como recoge la denuncia: “la EMT utiliza de forma fraudulenta la contratación menor y adjudicación directa, realizando fraccionamientos indebidos. Existen contratos que tienen unidad funcional, que tienen el mismo objeto y, sin embargo, con el fin de no superar los límites marcados en el precepto en cuestión (15.000 euros), son divididos en diferentes expedientes de contratación (…) Lo anterior permite a la EMT adjudicar cada expediente al empresario que buenamente considere, sin cumplir ni un solo trámite o requisito, lo que, como hemos venido insistiendo, choca frontalmente con el principio de libre concurrencia”.

José María Llanos, presidente provincial de Vox Valencia destaca que “Vox ha presentado una querella contra G. Grezzi y la EMT por cuanto se aprecian indicios graves de delito en la fragmentación de los contratos para no someterse a los controles políticos ordinarios, así como en clara vulneración de la transparencia con la que tanto se le llena la boca a Ribó, pero que tanto vulnera”.

Llanos considera que “es el día a día de Compromís y de su socio el PSPV: decir una cosa y hacer todo lo contrario. Si se acreditan estos hechos denunciados, está clara la comisión del delito de prevaricación administrativa, que supone además de un perjuicio directo, también una burla a todos los valencianos que están haciendo esfuerzos enormes para sobrevivir”.

El texto jurídico no solo apunta al fraccionamiento injustificado de los contratos de la EMT, sino que, “además, emplea de forma reiterada y fraudulenta la contratación por adjudicación directa, incumpliendo todo tipo de requisitos y formalidades”. En el escrito, Vox añade que la EMT viene desarrollando una “conducta típica, configurada por haber hecho uso de contratos menores sin justificación, lo que determina, en esencia, la omisión de todo proceso selectivo para la cobertura de las plazas mediante concurso público, con quiebra de los principios de publicidad, concurrencia, transparencia, igualdad y libertad de acceso”.

En opinión del vicesecretario jurídico, Pepe Gosálbez, “está claro que la EMT necesita sí o sí gasoil y repuestos para funcionar. Es algo recurrente, previsible y periódico. Lo que hemos detectado es que la EMT ha utilizado los contratos menores o la adjudicación directa, prevista para actuaciones o adquisiciones concretas, puntuales y justificadas para la compra de gasoil y de repuestos. De esta forma, se ha adjudicado reiteradamente a los mismos proveedores y por medio de ‘dedocracia’ determinados contratos. Esto podría constituir fácilmente un delito de prevaricación continuada y por ello presentamos esta querella contra la EMT y el presidente de su consejo de administración, Giusseppe Grezzi. Estamos hablando de adjudicaciones directas sin publicidad ni libre concurrencia y que ascienden, en algún caso, a más de 4 millones de euros sumando todas las adjudicaciones directas a un mismo proveedor”.

Los contratos a los que hace referencia la querella se centran en los expedientes relativos al suministro de Gasóleo A, mantenimiento y repuestos.