Economía
Puig aprueba ayudas directas por la guerra pero se niega a bajar impuestos
La Generalitat presenta el Plan Reactiva, dotado con 944 millones de euros y estructurado a través de 45 medidas
El presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha seguido la misma estrategia que el Gobierno central para hacer frente al escenario de hiperinflación ocasionado por la guerra en Ucrania: ayudas directas para particulares y empresas, pero ninguna bajada impositiva.
A pesar de que una deflactación de la tarifa autonómica del IRPF habría servido para equilibrar el poder adquisitivo de los valencianos y valencianas y adaptar la renta a la nueva realidad, el Gobierno valenciano ha preferido presentar un paquete de medidas dirigidas a paliar los efectos de la inflación y a incentivar las energías renovables, dotado con 944 millones de euros. De esta cantidad, 385 millones serán para ayudas a empresas, familias y autónomos; 380 millones se destinarán a medidas de eficiencia y ahorro energético; 71 millones a la lucha contra la inflación, y 68 millones para la aceleración de la autonomía energética.
El bautizado como Plan Reactiva contiene 45 medidas y está estructurado en cuatro ejes: la lucha contra la inflación, las ayudas para la industria intensiva especialmente dependientes del gas, medidas dirigidas a la eficiencia y al ahorro energético y medidas para la transición y la autonomía energéticas.
Algunas de estas medidas ya se habían ido desgranando a lo largo de los últimos días, como los 50 millones de euros que el IVF adelantará a las empresas gasolineras para bonificar los 20 céntimos por litro aprobados por el Gobierno, el aumento en 10 millones de euros de la partida para los seguros agrarios, o la reducción de algunas tasas autonómicas.
En concreto, contempla una reducción mínima del 10 por ciento en las tasas y precios públicos autonómicos, como los de la enseñanza musical, artística y de idiomas, que beneficiarán a 100.000 estudiantes; el fomento del título único Suma en las redes de Cercanías y una bajada del 50 por ciento en el TRAM de Alicante.
También la exención total de las tasas a los pescadores por el uso de los puertos autonómicos, que beneficiará a 700 armadores, 1.700 marineros y 17 cofradías, y se incrementará, hasta el 30 por ciento el bono de ayuda energética para familias vulnerables que perciben la Renta Valenciana de Inclusión.
Ayer se dieron a conocer otras ayudas, entre las que destaca un bono de 100 euros al mes durante tres meses para los autónomos, 50 millones de euros para las empresas del sector cerámico y textil que no han sido incluidas en las ayudas directas del Gobierno, 137 millones de euros para las empresas que han bajado sus ingresos y circulante y once millones de euros para subvencionar e impulsar la instalación de energías renovables en los domicilios.
El Plan Reactiva estará financiado con fondos propios de la Generalitat, así como con fondos europeos y del Mecanismo para la Recuperación y Resiliencia, y contempla ayudas complementarias a las aprobadas por el Gobierno de España.
Puig precisó que se trata del plan más importante puesto en marcha por una comunidad autónoma, y será «dinámico» pues estará abierto a la incorporación de nuevas ayudas.
Freno a la inflación
Por su parte, el presidente de la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV), Salvador Navarro, apoyó las medidas presentadas por la Generalitat y señaló la importancia de evitar «una retroalimentación de salarios y de precios», para lo cual explicó que las empresas no deben repercutir la totalidad del incremento de sus costes en el precio que paga el consumidor, para evitar así que la inflación siga aumentando.
Pidió además ayudas directas a las empresas más afectadas por esta crisis, que son principalmente aquellas que dependen mayoritariamente del gas, así como paralizar las alzas impositivas hasta que la situación se estabilice.
Por su parte, el secretario general de UGT, Ismael Sáez, se mostró en contra de la petición de bajada de impuestos generalizada planteada por el PP, y aseguró que dicha propuesta «no tiene sentido» puesto que «las crisis no afectan por igual a todos». Sí comparte, dijo, que la administracion haga un esfuerzo por cubrir los costes de trabajadores y familias que se encuentren en dificultades.
✕
Accede a tu cuenta para comentar