
Dana: la vía judicial
Emergencias contesta a la jueza que la Confederación Hidrográfica no informó de la crecida del Poyo
Un informe repasa la cronología del día 29 y argumenta el "apagón informativo" en las horas clave

La Generalitat valenciana sigue enviando la información que la jueza de Catarroja solicita para avanzar en la investigación para determinar la responsabilidad de la gestión de la dana del pasado 29 de octubre. El informe, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, responde a las alertas hidrológicas emitidas no solo el día de la riada, sino también a los días previos.
El encargado de firmar este documento es el subdirector general de Emergencias, Jorge Suárez, un funcionario que ya se encontraba en este puesto en la etapa del Gobierno del Botànic.
El informe afirma que el Plan Estatal de Protección Civil ordena que sean las confederaciones hidrográficas las que deben facilitar la información relacionada con los riesgos que puedan producirse en cauces y barrancos. Esta obligación está recogido en el apartado 3.3 de este plan.
Suárez relata que el día 29 la Sala de Emergencias de la Generalitat recibió 127 correos que contenían alarmas de superación de umbrales considerados normales en lluvias, caudales y también desembalses.
Concretamente, asegura que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) notifica el primer incremento destacable de caudal en la rambla del Poyo por un pico de 264 metros cúbicos por segundo a las 12:07 horas. Apenas 15 minutos más tarde el Centro de Coordinación de Emergencias (CEE) declara la "alerta hidrológica" y así lo comunica a los Ayuntamientos por diferentes medios. A continuación, se reciben tres avisos seguidos que constatan que el caudal va bajando.
Como ya se ha relatado la Generalitat a lo largo de los últimos meses, no se recibe nuevo aviso hasta las 18:43, cuando por el barranco del Poyo bajan ya 1.863 metros por segundo. En este documento que remite a la jueza, el subdirector general de Emergencias vuelve a insistir en que hubo un "apagón informativo" sobre este punto en las horas más críticas de la riada. El punto de atención, han insistido en innumerables ocasiones, era el embalse Forata, por cuya estructura se llegó a temer. La Generalitat valenciana ha señalado también que la CHJ incumplió su propio protocolo, pues no comunicó "de forma redundante, ni de cualquier otro modo a las autoridades de Protección Civil las crecidas superiores a 150 metros cúbicos por segundo". El caudal alcanzado en esas horas críticas fue muy superior. "325,5 metros cúbicos por segundo a las 17 horas y 1.725 a las 18 horas). La comunicación, nuevamente, fue vía correo electrónico.
Además, fuentes de la Generalitat afirman que cuando por fin llega la notificación del aumento de caudal ni la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, ni el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Miguel Polo, hacen referencia alguna en el Cecopi, al que ambos están conectados telemáticamente.
En el documento queda reflejado que el plan especial frente al riesgo de inundaciones se activó el 24 de octubre tras recibir un aviso de Aemet y así se comunicó a los municipios que podían verse afectados mediante correos electrónicos y faxes, entre otros medios.
✕
Accede a tu cuenta para comentar