«Billy Budd», contra viento y marea

El montaje del Teatro Real se alza con el premio a la mejor nueva producción en los International Opera Awards.

La embarcación llegó a buen puerto y «Billy Budd», ópera de Benjamin Britten, se coronó ayer en los International Opera Awards como la mejor nueva producción (en este caso del Teatro Real), premio que un coliseo español consigue por primera vez. Lo recogió su director artístico, Joan Matabosch. Desde el Real, que hoy presentará su próxima temporada, no podían disimular ayer la emoción. La obra se estrenó el pasado enero de 2017 y recibió muy favorables críticas, como la que se escribió desde estas páginas, en la que se hizo notar el «enorme escenario aparentemente vacío, pero lleno de complejidad técnica, simula a la perfección el barco del libreto y la cárcel en la que parecen encerradas belleza, bondad y justicia en un ambiente claustrofóbico y violento». El Real había resultado también finalista en las categorías de mejor coro, recuperación de una obra «Bomarzo», de Alberto Ginastera» y mejor compañía de ópera.

A este importante galardón se sumó el que recibió la mezzosoprano Teresa Berganza al ser galardonada con el premio a la trayectoria profesional de una vida. En la ceremonia que tuvo lugar anoche en el London Coliseum, Berganza dijo que sentía una «gran emoción al recibir este premio invaluable en nombre de toda una generación, los que aún están entre nosotros y los que nos han abandonado. Esperamos que hayamos cumplido nuestra misión. Ahora dejamos el foco de atención para vosotros», señaló en referencia a los jóvenes talentos.

John Allison, presidente del jurado de esta sexta edición y editor de la revista «Opera» explicó que elegir a Berganza fue «una de las decisiones más fáciles a que nos hemos enfrentado. Todo el mundo operístico siente por ella un gran amor y estima. Con una carrera que ha durado casi de medio siglo, su arte ha sido notablemente consistente y se ha basado en la musicalidad completa y en una voz de gran distinción. En sus papeles principales, sobre todo en Mozart y Rossini, pero también en Carmen y Charlotte, no ha tenido rival y continúa dejando huella en la ópera gracias a su trabajo con jóvenes cantantes. Ella, de hecho, ha dedicado su vida a la música». Entre los otros galardonados se distinguió a Valdimir Jurowski como mejor director, a Malin Byström como mejor cantante femenina y a Piotr Beczala como mejor voz masculina. La Bayerische Staatsoper fue la mejor compañía de ópera y la mejor orquesta, la de la Scala.

Fundados en 2012 por el empresario y filántropo Harry Hyman, los International Opera Awards no solamente reconocen el trabajo de los artistas consagrados, sino que apoyan a las nuevas generaciones. En este sentido, los premios recaudan dinero para la Opera Awards Foundation, una organización benéfica que ofrece becas para aspirantes a talento operístico de todo el mundo.