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Crítica de "Mufasa: el rey león": una precuela que no ruge ★★

Dirección y guión: Barry Jenkins. Guion: Jeff Nathanson. Voces originales: Aaron Pierre, Kelvin Harrison, jr., Tiffany Boone, Kagiso Lediga. Estados Unidos, 2024. Aventuras.
Crítica de "Mufasa: el rey león": una precuela que no ruge ★★
Un fotograma de "Mufasa, el rey león"Imdb
Sergi Sánchez
  • Sergi Sánchez

    Sergi Sánchez

Barcelona Creada:

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Será que las grandes corporaciones disfrutan dinamitando la política de los autores, aunque, históricamente, esta se forjó a partir de la obra de cineastas que trabajaban bajo los férreos contratos de los estudios de Hollywood. Pero el caso de Barry Jenkins no es, por ejemplo, el de Nicholas Ray, no solo porque el primero aún no ha dirigido su “Rebelde sin causa” sino porque el segundo no fue absorbido desde los márgenes del cine independiente
El salto desde “Medicina para la melancolía” hasta “Mufasa: El rey león” es enorme. Si se esfuerza, este crítico puede detectar en esta precuela de “El rey león” algo de la sensibilidad huérfana de “Moonlight”, de ese sentimiento de falta de pertenencia que Mufasa comparte con el protagonista de aquel magnífico filme, sobre todo en el primer acto de la película. Pero tal vez no se trate de si Jenkins ha podido conservar su mirada autoral y su integridad artística en su contribución a la batería de ‘reboots’ que la Disney está realizando a partir de sus clásicos animados. 
Se trata, simplemente, de si ha sabido adaptarse a las exigencias de un cine digital que, aquí, aún parece tener problemas para trabajar las diferencias de expresión de animales de una misma especie, generando una homogeneidad en la imagen que, a veces, dificulta la conexión emocional con el drama. Se trata de que el fotorrealismo no aniquile aquel “sense of wonder” imprescindible para el goce del cine de aventuras en estado puro. 
Se trata de por qué las canciones de Lin-Manuel Miranda suenan tan poco inspiradas, y parecen metidas con calzador, como si la película se viera obligada a ser un musical que se siente incómodo en su propia piel. Se trata de encontrar el difícil equilibrio entre el tono del relato oral, atravesado por ráfagas de humor autoconsciente, y la historia principal, la de Mufasa separado de sus padres por una riada, y la de su adaptación a su familia de acogida, eminentemente trágica. 
Y luego está la acción, que resulta en exceso reiterativa, y que solo despierta interés en su registro más shakesperiano, cuando la traición fraternal abre la puerta a explicar el conflicto vertebral de la película original, y “Mufasa” adquiere sentido como precuela. Da la impresión de que el filme coloca sus piezas en posición estratégica para dar continuidad a la saga, pero es evidente que la fórmula está agotada, y que Jenkins no tiene el talento digital de un Ang Lee.
Lo mejor: 
El planteamiento de la historia de Mufasa, su sentimiento de orfandad y desubicación.
Lo peor: 
Es una película que no fluye, cansina y plomiza, atrapada en un fotorrealismo frío y homogéneo.