Literatura

Carolina África: «“Opio en las nubes” es un libro perfecto para quienes busquen un viaje psicodélico»

La dramaturga, directora y actriz recomienda la potente obra de Rafael Chaparro

La dramaturga Carolina África
La dramaturga Carolina ÁfricaCarolina África

Carolina África es una de las voces teatrales más sugestivas de la dramaturgia actual. Este año, que celebra el décimo aniversario de su compañía La Belloch, acaba de terminar con el CDN «El cuaderno de Pitágoras», fruto de la experiencia en una prisión, repone «Otoño en abril» y es guionista de «La matemática del espejo» de TVE. Recomienda la lectura de «Opio en las nubes», del colombiano Rafael Chaparro.

¿Cómo lo descubrió?

Por un amigo también colombiano cuando estudiaba en la RESAD en 2004, hace mucho tiempo. Era diferente a todo lo que había leído y me sorprendió.

Rafael Chaparro
Rafael Chaparroarchivo

¿Qué encontró en él?

Tiene algo de realismo mágico y esa extrañeza de animales que hablan, como el gato Pink Tomate, que de pronto es el narrador de la historia. Me fascinó su mundo sensorial, me podía sumergir en los olores, en el alcohol, en ese halo de desesperanza generalizada de los personajes, su soledad, esa búsqueda de cariño...

¿También el momento?

Quizá por la relación con ese chico, que era muy especial para mí. Estudiando empezaba a leer teatro sobre todo y con el ritmo de la escuela dejé algo abandonadas las novelas, que era una de mis pasiones. Descubrirlo fue como un oasis alejado de lo teatral.

Son personajes especiales.

Es el estilo de vida y las experiencias de un grupo de adictos a las drogas, las fiestas, el rock, el sexo, como personajes de una bohemia francesa, unos desesperanzados que se encuentran en una zona muy oscura del alma y en ello ven un camino para evadirse de la realidad, la soledad interior, para arañar cariño con frases potentes que van como dardos al alma, pero también hay humor.

¿Podría adaptarse al teatro?

Me encantaría hacer una dramaturgia. En Columbia se realizó y la he pedido a través de amigos, aunque no consigo hacerme con ella.

¿A quién se lo recomienda?

A aquellos que busquen algo diferente, que les apetezca un libro sensorial para viajar más allá del entender consciente o darse un viaje casi psicodélico. A partir de los 18 años, mejor, porque entronca con los adolescentes y su primer amor y tienen esa energía de querer comerse el mundo, aunque los libros tienen algo precioso, te cuentan cosas distintas en cada época de tu vida. A raíz de hablar de él tengo ganas de abordarlo de nuevo, a ver qué me cuenta ahora y si sigue manteniendo esa sorpresa que me causó entonces.