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La habitación roja, demasiado corazón

El grupo presenta nuevo disco hoy en el San San Festival y la semana que viene en Madrid
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El grupo presenta nuevo disco hoy en el San San Festival y la semana que viene en Madrid
Después de 20 años tocando en un grupo, Jorge Martí decidió que era buen momento para hacer balance. «En La Habitación Roja no somos nada nostálgicos, pero creo que estaba bien pararse a pensar. Me di cuenta de dónde estoy viviendo y por qué, y de dónde viven Jordi, Marc y Pau. Todos vivimos en ciudades diferentes por amor y, a pesar de eso, seguimos formando un grupo a distancia por amor a la música. Es difícil llevarse bien tanto tiempo, con los viajes y la exigencia. Me he dado cuenta de que hemos hecho todas estas cosas por encima de la razón, a base de corazón», señala Martí sobre la idea central del nuevo álbum de la banda, «Sagrado corazón», que el grupo valenciano edita en la cima de su popularidad y que presentarán hoy en el San San Festival y la semana que viene en Madrid.
«Hemos vuelto a conectar con la emoción primigenia de fundar La Habitación Roja. Los sentimientos que nos unieron para hacer canciones tienen más valor ahora, en un momento en el que sólo escuchamos que nos roban y leemos de atentados. Las redes sociales se utilizan para odiar y para criticar de forma gratuita y nuestra reacción ha sido escapar al lado contrario de eso», explica el vocalista. «Volverás a brillar» es el tema que sintetiza el mensaje del álbum, una canción que habla del poder redentor del amor y la amistad. «Y es una canción dedicada a mi mujer, que está enferma desde hace seis años y nunca tira la toalla, al contrario que yo, que cada día me rindo». «Escribo como vivo. Hacemos canciones fieles a nuestros sentimientos. No hay nadie impostando, así es como somos y como son los artistas que nos emocionan. Sé que a veces andamos por el filo de la navaja pero nunca nos planteamos si algo es cursi porque nunca nos dejamos ir demasiado lejos. Tenemos ese pudor, pero en el fondo son los mismos temas de los que canta, por ejemplo, Richard Hawley. Los asuntos universales del pop», apunta Martí, que vive en un pequeño pueblo de Noruega, en lo que denomina «un ambiente que puede llegar a ser frío, solitario y hostil. La música me ha permitido digerir los problemas. A veces como refugio, y otras como vehículo de expresar lo que me aflige».

Una para bailar

El grupo, que ya va por su duodécimo disco, ha ido aumentando su masa crítica de seguidores con cada álbum. En este trabajo, en contra de lo que dice Martí, jugaron a impostarse, a ser otra banda. «Como un experimento, o un juego. La idea de ‘‘You Gotta Be Cool’’, era ser otro grupo. Desde el título, en inglés, pero sobre todo en el estilo del tema, que es totalmente distinto al del álbum», explica. La canción, que se ha adelantado al lanzamiento del trabajo, parte de una anécdota. «Estaba en Valencia, visitando a mis padres. Y empecé a escuchar las canciones que les gustan a mis hijas –grupos como Maroon 5 o Taylor Swift–, y les pregunté si querían que papá hiciera una canción que se pudiera bailar. Y así surgió este tema que hace unos años no nos habríamos atrevido a grabar. Y es curioso, porque los temas que más les gustan a ellas son los que después más han calado en el público: ‘‘Voy a hacerte recordar’’, ‘‘Ayer’’, ‘‘Indestructibles’’ o ‘‘De cine’’. Imagino que captan las cosas sin prejuicios, pero si les pongo un disco de The National me dicen que lo quite, que es un bajón...».
«Creo que hemos hecho uno de nuestros mejores discos, aunque, claro, qué otra cosa podría decir, ¿no? Pero lo pienso de verdad. Ya desde ‘‘Fue eléctrico’’ nos hemos abierto a otra forma de componer que es la que mejores oportunidades nos ha dado. Pero ha sido gracias a la madurez, que nos ha dado una personalidad suficiente para probar caminos que antes no nos atrevíamos a recorrer». Hay guiños a Valencia, por lo que tiene de distancia y de pérdida para el cantante. Un paraíso perdido desde la fría Noruega. Pero tampoco hay que ponerse tristes. «No, porque tu situación y la del mundo no cambia tanto. Sólo es distinta la actitud con la que la afrontas. Por eso me gusta que digan que La Habitación Roja es un grupo que hace canciones tristes que le ponen contenta a la gente», dice Martí.