Polémica

Fernando Alonso y la guerra del VAR en la F-1

A pesar de toda la tecnología con la que cuentan los jueces, la polémica los sigue persiguiendo. El bicampeón del mundo es uno de los más críticos

Michael Masi ha sido despedido como director de carrera tras la polémica del último Gran Premio del curso 2021
Michael Masi ha sido despedido como director de carrera tras la polémica del último Gran Premio del curso 2021F1Twitter

La Fórmula Uno lleva meses agitada por las decisiones que toman los jueces de carrera, es decir, los comisarios deportivos nombrados por la Federación Internacional del Automóvil, la FIA. Las quejas proceden de los pilotos, con Fernando Alonso a la cabeza, y de los aficionados, a los que cuesta entender las razones que llevan a tomar algunas decisiones. Pero la cosa se agrava cuando se toma una decisión distinta por un mismo hecho como ya ha ocurrido en dos ocasiones.

La última polémica fue la no sanción a Max Verstappen cuando, literalmente, «empujó» al exterior de la curva a Hamilton al querer adelantarle en el pasado Gran Premio de Brasil. Una sanción de cinco segundos se daba por hecha. No fue así. Pero, ¿cómo trabajan los árbitros de la Fórmula Uno? ¿Quiénes son? ¿Con qué tecnología cuentan? ¿Hay VAR en la F-1? La tecnología con la que cuentan en este deporte para determinar un comportamiento irregular es muy avanzada. Lo del fútbol es una broma a su lado. No sólo tienen la señal de televisión, sino también las dos o tres cámaras que llevan los pilotos en su coche, al margen de una cámara de 360 grados que incorporan los pilotos de arriba. Y no sólo eso. Hay mucho más.

Los jueces pueden tener acceso a la telemetría, es decir, pueden averiguar el giro de volante que tuvo el piloto en el momento del incidente (el sistema dice si el volante estaba muy o poco girado y también la fuerza con la que se hizo el movimiento, lo cual puede ser un signo de intencionalidad) y, por supuesto, la intensidad de una frenada. Si el piloto frenó como siempre o si hizo alguna maniobra específica durante el momento juzgado.

Trasladado al fútbol sería como si el árbitro pudiera conocer a través de un dato objetivo la intensidad de una patada o de un agarrón para determinar si hubo o no falta o penalti. Aún así, la polémica siempre existe y los comisarios interpretan la norma con una inquietante subjetividad en muchas ocasiones. Y a todo esto, hay que añadir que la FIA permite comunicaciones fluidas por radio entre los representantes de los equipos y el director de carrera, es decir, el juez principal. Los mensajes son «misiles» cuando se trata de acusar a algún piloto o el puro sarcasmo cuando se trata de defenderse de una posible sanción. Por eso es corriente escuchar a algunos pilotos ofrecer su argumento de defensa cuando han cometido alguna infracción. Pura estrategia para empezar a influir sobre los tres comisarios-jueces que emiten las sanciones. Este trío suele estar formado por al menos un ex piloto de F-1 o de Le Mans y dos comisarios con mucha experiencia y conocimiento del reglamento deportivo. Es cierto que no toda la tecnología la tienen disponible al momento, pero cuentan con muchas más herramientas que el equipo VAR del fútbol. El domingo, una maniobra claramente punible de Verstappen contra Hamilton no fue castigada. Ayer, Michael Masi, director de carrera, reconoció que de haber tenido más información la cosa hubiera sido diferente. Eso sí, no ha hecho nada para iniciar un posiible procedimiento de sanción a Verstappen para la próxima carrera.