El Rayo Vallecano puede presumir de que algunos de los mejores delanteros del siglo XX vistieron la Franja. Donde ahora llega el colombiano Radamel Falcao García, antes estuvieron Fernando Morena, Hugo Sánchez y Toni Polster. Los tres solo pasaron una temporada en Vallecas, pero su recuerdo permanece indeleble.

Falcao aterriza con 35 años, los mismos que tenía Hugo Sánchez cuando fichó por el Rayo, y con el físico muy golpeado por las lesiones. Pese a todo, la llegada del Tigre ha revolucionado el barrio. El reto del colombiano, que llega con más de 300 goles celebrados, será intentar superar los 15 tantos de Polster, los 16 de Hugo o los 21 de Morena, pero, sobre todo, conseguir que el equipo siga en Primera, algo que solo logró Polster.

Si Falcao y Hugo eligieron el Rayo ya en el declive de su carrera, el uruguayo Fernando Morena lo hizo en toda su plenitud. Era un delantero excepcional, un goleador extraordinario, de dimensión mundial, seguramente el mejor que ha pasado por el club en toda su historia, y que sorprendió fichando por el Rayo en 1979. Llegó después ser máximo goleador de la liga uruguaya seis temporadas seguidas con Peñarol, donde promedió 1,28 tantos por encuentro, y a cambio de 500.000 dólares, una fortuna en esa época. En su fichaje tuvo mucho que ver el entrenador del equipo, su compatriota Héctor Núñez.

Cerró el curso con 21 goles, una cifra solo superada por Quini (24), Santillana (23) y Kempes (22), pero no pudo evitar el descenso del Rayo. Se marchó al Valencia, donde solo estuvo un año y es recordado por el gol que le dio la Supercopa de Europa contra el Nottingham Forest. Los aficionados de Peñarol querían su vuelta y organizaron una colecta, bajo el lema ‘A Morena lo traemos todos’, para recaudar el millón de euros que el Valencia pidió por su traspaso. A lo que reunieron los seguidores se sumó la aportación de varios empresarios hasta juntar la cantidad necesaria y Fernando Morena regresó a Peñarol. Es el máximo goleador en la historia de Peñarol (440) y de la Liga uruguaya (230) y el segundo de la Libertadores (37).

Los goles de Hugo Sánchez tampoco sirvieron para que el Rayo se mantuviera en Primera en la temporada 1993-94. Después de su exitoso paso por Atlético y Real Madrid, Hugo llegó al Rayo, fichado por José María Rúiz Mateos, para cumplir su ambición de jugar en los tres grandes equipos de la capital y para huir de los directivos del América de México, con los que estaba enfrentado.

“Querían adueñarse de mi imagen. Me fui al Rayo Vallecano no por gusto, sino por no aceptar que me humillaran. Preferí fichar por el Rayo dejando de ganar más del 50% de lo que iba a ganar en el América por tener mi dignidad intacta”, declaró Hugo en 2019 en una entrevista con ESPN.

Marcó 16 goles en 29 partidos con el Rayo y se despidió para siempre del fútbol español. Logró 517 tantos en una carrera que alargó hasta los 39 años. Se retiró en el Atlético Celaya, junto a Emilio Butragueño y Michel.

Una temporada antes que Hugo pasó por el Rayo otro goleador magnífico, el austriaco Toni Polster. De los 429 tantos que firmó en toda su carrera, 15 los hizo con la camiseta del Rayo. Polster tenía 28 años cuando llegó a Vallecas y se fue a la Bundesliga dejando al equipo donde lo encontró, en Primera.