Amaya, cazado a 234 km/h

El jugador del Rayo Vallecano circulaba a esa velocidad a las 8:49 de la mañana. El club no lo sancionará

El jugador del Rayo Vallecano Antonio Amaya, que pasó a disposición judicial después de ser detenido el martes por la Guardia Civil cuando circulaba a 234 kilómetros hora en la M-301, en Madrid, en una zona de velocidad limitada a 100 kilómetros por hora, no será sancionado por el club. La intención de la entidad rayista, después de conocer los hechos acaecidos el martes, es no sancionar al futbolista por una situación que pertenece a su «vida privada» y que se debe resolver por la vía judicial tras la infracción.

Los agentes del sector de Tráfico de Madrid, que se encontraban realizando servicios de vigilancia en carretera, detectaron un automóvil que circulaba a gran velocidad e inmediatamente alertaron a la Central Operativa de Tráfico Sur. Un coche patrulla logró interceptar al vehículo, un Porche Panamera, y detener a su conductor, a quien se le imputa un delito contra la seguridad vial, recogido en el artículo 379.1 del Código Penal.

Amaya, de 32 años, se enfrenta a una posible pena de prisión de tres a seis meses, a una multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, y en cualquier caso a la privación del permiso de conducir de uno a cuatro años.

El jugador madrileño, que llegó tarde al entrenamiento matutino del martes debido a este incidente en los alrededores de Madrid, se volvió a ejercitar ayer con absoluta normalidad junto a sus compañeros. Amaya no ha querido hacer declaraciones sobre el último incidente protagonizado por un futbolista de élite.

El presidente rayista, Raúl Martín Presa, aseguró que «es un tema de la Policía y de la Guardia Civil. Tendremos que hablar bajo qué circunstancias, qué condiciones, y luego haremos valoraciones. Tenemos que saber qué ha sucedido. Sabemos lo que ha puesto la Prensa y tenemos que ver las circunstancias y el porqué. Hay que hablar con el jugador. Es un suceso que sucede fuera del Rayo. Somos un club serio, respetuoso con todo el mundo y es la imagen que queremos transmitir al exterior». Desde el club rayista se esgrime que se trata de un asunto privado y por eso no habrá ningún tipo de sanción.

Luis Yañez, director general: “Es un tema de ámbito privado de Antonio. Habrá que escucharle, darle la presunción de inocencia y ver el expediente que le hayan sacado. No es un expediente que tengamos en nuestra mano. Tenemos que esperar y valorar el abanico de circunstancias. No sabemos las circunstancias. Hay que estar pendiente de lo que diga Antonio y el deberá dar explicaciones delante de la gente que tiene potestad judicial”.

El últiimo infractor

Los futbolistas son presa habitual de los radares en España. Benzema, Drenthe, Özil, Marcelo... son algunos de los ilustres antecesores del jugador del Rayo. A Pepe Reina le «cazaron» en su etapa en el Liverpool; Ballack, ex internacional alemán, fue pillado en Cáceres. Otros como Piqué también tuvieron problemas con el coche, aunque en su caso fue por un mal aparcamiento.