Restringido
Laporta espera día y hora
Joan Laporta mantiene como estrategia un silencio casi absoluto, sabedor de que es el enemigo público número uno de una junta directiva cogida con alfileres. El ex presidente tiene buena información de la guerra interna que libran los tres pesos pesados (Bartomeu, Faus y Vilarrubí). Una lucha encarnizada por el poder. Esto, sumado a los frentes abiertos con la Justicia y la FIFA, que les ha costado ya más de 900.000 euros en abogados, avala las razones del hombre al que han buscado desprestigiar hasta límites insospechados con acusaciones muy graves. Pero la Justicia le dio la razón a Laporta, que se siente moralmente muy fuerte para luchar en unas urnas que le harían de nuevo presidente.
- Contundente en Montmeló
Los tiempos revueltos los vive ahora el «presidente okupa». Dicen que «a perro flaco todo son pulgas» y Bartomeu vive con el olor a pólvora en su trasero. Esta semana anticipamos en «El Chiringuito de Jugones» el comentario que Laporta hizo en Montmeló a gente relevante. Cuando le preguntaron si se iba a presentar a las próximas elecciones, él respondió de forma rotunda: «Cuando pongan día y hora, allí estaré». Está claro que el ex presidente presionará como valedor principal a la petición social, que vería con buenos ojos su vuelta al club. De momento, en Montmeló, ya se dio un baño de masas fechas atrás.
- Planta noble dividida
Aquella frase de Narcís de Carreras («El Barça es más que un club») está de rabiosa actualidad, pero en las actuales circunstancias es por culpa de todas las noticias extradeportivas y de pleitos judiciales varios que se están generando alrededor de la institución azulgrana. El todavía presidente, Josep Maria Bartomeu, sigue sin dar con el rumbo de una planta noble dividida y en estado de guerra interna, y se encuentra más solo que la una...
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