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Jewison Bennette, el futbolista que juega el Mundial de Qatar 2022 y va a los partidos de su equipo en autobús

El extremo costarricense es el cuarto futbolista más joven del Mundial

Jewison Bennette debutó en el Mundial de Qatar ante España
Jewison Bennette debutó en el Mundial de Qatar ante EspañaPavel GolovkinAgencia AP

Quienes se montaron en el autobús de la línea 24 el pasado 1 de octubre dirección South Shields desde el estadio del Sunderland, después de que los «Gatos Negros» hubieran empatado sin goles contra el Preston, se encontraron con un sorprendente compañero de asiento. Tan normal, con unos vaqueros, una camiseta y una gorra rojas y unas zapatillas de deportes iba sentado Jewison Bennette, el joven extremo al que algunos de los viajeros acababan de ver sobre el césped. Estaba volviendo a casa, con su padre al lado, y ese mismo autobús es el que había cogido para ir al partido. Nadie se quedó sin su foto de recuerdo. «¿No es fantástico?», reflexionó Tony Mowbray, técnico del Sunderland, que explicó que eso mismo es lo que hacían las leyendas futbolísticas antiguamente para estar más cerca de los aficionados.

Jewison todavía no tiene carnet de conducir, pero fue en transporte público para integrarse en su comunidad. En realidad, está todavía en un proceso de adaptación a una nueva vida que le va muy rápido. Tiene 18 años (cumplidos en junio), y es el cuarto futbolista más joven en el Mundial, por detrás del alemán Moukoko, que llegó a esa edad justo el día que empezó el campeonato; del australiano Garang Kuol, que lo hizo en septiembre; y del español Gavi, en agosto. Aporta la chispa y el descaro a una selección como la de Costa Rica, que tiene once jugadores con 30 años o más. El pasado agosto le llegó la gran oportunidad de viajar de su país a la Championship, la Segunda División inglesa. El Sunderland está intentando montar un equipo donde el talento está por encima de la edad y de Costa Rica, en una visita, les llamó la atención un extremo rápido y con descaro. Volvieron para verle un par de partidos más y le firmaron un contrato por cuatro años. Así, Bennette cambió su Heredia natal por Sunderland, donde se ha ido ganando a los seguidores con gestos de humildad como el del autobús y con buenas actuaciones en el campo, donde se transforma. «Siempre que entro a la cancha pienso que soy el mejor», afirma. En Qatar no duda en señalar: «Si soñar con ser campeón del mundo es estar loco, yo lo estoy». No empezaron bien con el 7-0 que encajaron de España, en el que participó.

De su presencia en la lista de los 26 elegidos de Costa Rica le informó su madre al otro lado del mundo, por teléfono, llorando, junto con sus abuelos y sus hermanos, más pequeños, Nick y Mike, gemelos y que también juegan al fútbol en el Herediano. Es el equipo en el que creció Jewison y donde también lo hizo su padre, que se llama como él. Al atacante del Sunderland siempre le preguntan si ha heredado el dribbling de su progenitor. «Puede que quede algo, pero me dicen que tenía muy mal carácter», asegura el extremo.

A lo primero que tuvo que adaptarse Bennette de Inglaterra es al frío. Con el idioma va avanzando, después de que le hayan puesto un profesor particular. Mowbray, su técnico, a veces le habla y piensa que no le entiende nada y que dice que sí por quedar bien, aunque en el fondo el lenguaje del fútbol es universal. Todavía no ha sido titular en la Championship, pero ha disputado 177 minutos en los que ha logrado un gol. Fue ante el Watford como visitante y ese día su padre acudió por su cuenta a la grada para verlo, pero no planificó la vuelta y no sabía ni dónde estaba (a 367 kilómetros de casa), por lo que le permitieron regresar en el autobús del equipo. También eso debe ser de familia.