Real Madrid
Keylor vuelve a la Liga
No jugaba desde agosto esta competición. La lesión de Courtois le da una pequeña oportunidad hoy contra el Betis. Sabe que su recorrido es corto, pero no pierde la fe
No jugaba desde agosto esta competición. La lesión de Courtois le da una pequeña oportunidad hoy contra el Betis. Sabe que su recorrido es corto, pero no pierde la fe.
A finales de agosto, Keylor jugó contra el Girona y, aunque él no lo sabía, se despidió de la Liga en 2018. No jugó ni un partido de ninguna competición en noviembre, sólo uno en diciembre y hoy va a disputar su segundo encuentro en enero, que serán tres el próximo miércoles en Leganés y depende de la lesión de Courtois para estar también contra el Sevilla. Su participación en el equipo titular no tiene pinta de ir más allá de la recuperación del belga y los partidos de Copa que dispute el Real Madrid. Al menos eso es lo previsto por el entrenador. Pero sólo es un plan terrenal, pues como decía el jugador en una entrevista en la revista «Vida Nueva»: «Hay que aceptar que mis deseos son una cosa, pero su voluntad es la que sirve. Dios tiene siempre algo maravilloso para cada uno de nosotros y siempre es mejor de lo que esperamos».
Cercano al núcleo español del vestuario, atento a lo que se dice de él en los medios, respetado por su trabajo constante, pasó de levantar la Champions en verano a ir desapareciendo. No se ha quejado públicamente, lo máximo ha sido colgar frases de la Biblia en las redes sociales: «En tiempo de sequía no se inquieta, y nunca deja de dar fruto (Jeremías 17:7-8)», escribió en una de sus suplencias. Fue titular los tres primeros encuentros que abrieron este curso, cuando Courtois aún no estaba en forma y Lopetegui no dejaba entrever quién era su guardameta titular. Después, el técnico vasco decidió que Navas era el portero de la Champions. Así pasó a jugar cada quince días. La llegada de Solari al banquillo espació aún más sus apariciones. Courtois, de manera definitiva, era el portero de las competiciones importantes y Navas se quedaba para los partidos de Copa.
Y también para las situaciones de emergencia, como la de hoy. En vez buscarle un equipo en enero, lo que ha hecho el Madrid ha sido aumentarle el contrato, para demostrarle que cuenta con él y que quiere un portero de garantías cuando el titular no esté listo. Navas ya demostró contra el Leganés que la suplencia no ha hecho mella en sus cualidades: sigue siendo tan ágil como de costumbre y así salvó al Real Madrid de recibir un tanto antes de que Vinicius se hiciera con el encuentro. Es un guardameta mucho más fiable en el uno contra uno y cuando reacciona por instinto que, por ejemplo, en los balones cruzados.
Lo que no le falla nunca, sin embargo, es la fe, en Dios, pero también en sus posibilidades de competir. «Hubo muchos momentos donde las cosas no salían como yo quería, muchas piedras en el camino, pero siempre pedí al Padre que me diera paz, confianza y sabiduría para poder seguir esforzándome, para encontrar fuerzas», contaba Keylor Navas en «Vida Nueva». Como ha pasado por tantas situaciones en el club blanco y como siempre ha terminado con éxito, considera, más que nadie, que al final, todo acabará bien para él y para el equipo. Hace un año, Kepa era el guardameta elegido para hacerle competencia y pelearle por el puesto. Nunca vino y Navas acabó ganando la tercera Copa de Europa consecutiva. No iba a jugar en Liga y hoy juega. La fe no la va a perder.
✕
Accede a tu cuenta para comentar