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Muere John Havlicek, uno de los padres de la leyenda de los Celtics

Es el máximo anotador y el jugador con más partidos en la historia del equipo de Boston

Fallece John Havlicek, leyenda de los Celtics y uno de los 50 mejores jugadores de la historia
Fallece John Havlicek, leyenda de los Celtics y uno de los 50 mejores jugadores de la historialarazon

Los Celtics de Boston ya tienen un motivo más para derrotar a los Bucks y alcanzar la final de la Conferencia Este. Ha muerto en Júpiter (Florida) con 79 años John Havlicek, una de las leyendas responsable del Orgullo Verde. Havlicek, miembro del Salón de la Fama, lo fue todo en los Celtics. Fue un «One Club Man» -hombre de un solo club-, jugó 16 temporadas con los bostonianos, ganó ocho anillos, jugó 13 veces el Partido de las Estrellas y en una ocasión fue elegido MVP (Jugador Más Valioso) de las Finales de la NBA.

Havlicek, de madre yugoslava y padre checoslovaco, fue una estrella de la Liga estadounidense antes de que se ésta popularizara en España. Con él los Celtics se convirtieron durante los 60 y los 70 del siglo pasado en la gran franquicia de la NBA. Ningún otro Celtic ha anotado tanto y ha jugado tantos partidos como este escolta-alero blanco. Precedió en Boston a otros jugadores legendarios como Dennis Johnson, Danny Ainge, Larry Bird, Kevin McHale y Robert Parish. Antes de ellos estuvo Havlicek. Sus 20,8 puntos, 6,3 rebotes, 4,8 asistencias, 1,2 robos de balón y una defensa feroz le convirtieron en leyenda en el Garden.

A Havlicek se le conocía como «Hondo» en referencia a la película del mismo título protagonizada por John Wayne y su personaje Hondo Lane. Era un atleta sobresaliente. Fue seleccionado en la séptima ronda del «draft» universitario de la NFL (Liga de Fútbol Americano), pero pesó más la primera ronda en la que le escogieron los Celtics. Havlicek llegó a un equipo ya mítico en Boston. Por allí estaban Bill Russell, Bob Cousy y Red Auerbach y él se convirtió en el sexto hombre de un equipo dominador. Sus excepcionales condiciones físicas (1,96 y 92 kilos) para ser un jugador blanco le convirtieron en un caso único y una jugada le transformó en mito. Fue en la final de la Conferencia Este de 1965 ante los Sixers. Havlicek era uno de los mejores ladrones de la Liga y en el séptimo partido un robo suyo decidió la eliminatoria. El locutor Johnny Most inmortalizó la acción con su gritó «Havlicek robó el balón». Luego llegó su tercer anillo y su consagración como supestrella de la Liga.

«Es el rostro de muchos de los momentos históricos de la franquicia. Sus acciones decisivas como jugador fueron su entrega completa y su sincero compromiso con el equipo por encima de uno mismo. Fue todo un ejemplo, un campeón en todos los sentidos», afirmó en un comunicado la franquicia del estado de Massachusetts. Los Celtics también destacan su papel fuera de la cancha: «Era extraordinariamente atento y generoso, tanto a nivel personal como para los necesitados, como lo demuestra su compromiso de recaudar fondos para la Fundación Génesis para Niños durante más de tres décadas a través de su torneo de pesca. John fue amable y considerado, humilde y cortés». Desde hace años sufría Parkinson y estuvo apartado de toda actividad relacionada con la NBA. Según el «Boston Herald», Havlicek había sufrido una neumonía en las últimas semanas y la familia lo había ingresado en un centro especializado para personas terminales. Descanso en paz uno de los muchos mitos de los Boston Celtics.