Supremacía de Marrero y Ortega con el tercer entorchado en sus vitrinas

Comenzaron pronto las hostilidades padeleras en Vigo, una final inédita este año con Lucía Sainz y Gemma Triay por un lado y Marta Marrero y Marta Ortega por el otro. Dos caminos diferentes hasta esta final, uno más sencillo que el otro, pero ambos con idéntico merecimiento.

Tras un temprano desayuno había que poner la vista en las cuatro jugadoras que llenaban la central de Vigo, por un lado unas Gemma y Lucía ‘’renacidas’’ tras un inicio de año dubitativo pero que parece haber vuelto por sus cauces de pelea de títulos y por el otro el de las ‘Martas’, pareja nueva en 2019 que ha encontrado esencia ganadora muy rápidamente.

Cierto es que llegaban mejor físicamente, al menos sobre el papel, Gemma y Lucía toda vez que en semifinales se habían ahorrado saltar a la pista por la lesión de AlAlba Galánientras que sus oponentes habían disfrutado de casi tres horas de intensísimo duelo ante PaPatty ElEli,area nada sencilla, pero una final es una final y solo cuenta el aquí y el ahora.

Con todo ello empezó un intenso partido en el que las cuatro guardaban su saque para que nadie se lo robase hasta que Marrero y Ortega dieron un pasito adelante y se adjudicaron el primer break de la mañana para, acto seguido, separarse en el marcador al consolidarlo, marchándose directas a la consecución del primer parcial con un par de marchas más y con la estadística de errores no forzados muy a su favor.

En poco mas de 45 minutos ya estaba decidido el primer envite por lo que se dio paso al segundo comenzando con idéntico caminar: saque asegurado, poca resistencia desde el resto y sin sorpresas. Lo intentaban cada una con sus armas hasta que las chicas de MarcMarcela Ferrariron esta vez las que golpearon, logrando ellas ponerse por delante con un break trabajado que encontró rapidísima réplica en las palas de la madrileña y la canaria que, lejos de quedarse ahí, siguieron hurgando en la herida a base de tiros potentes para lograr una distancia que resultaría definitiva para cerrar el partido.

No pudieron ya reaccionar Gemma y Lucía y entregaron al final el cetro de Vigo a sus rivales, que se afianzan todavía más en lo alto de la clasificación (3-6 y 4-6) con un triplete que sabe a gloria.