Una final para cambiar el orden establecido

Con la lluvia como molesta invitada a la fiesta, el pádel femenino vivió una semifinales de auténtico escándalo, con dos partidos muy animados por parte del púbico y una pareja que, con su apoyo, consiguió llegar contra pronóstico a la final, derrotando a las números 1: Lucía Sainz y Gemma Triay.

Es cierto que el respetable andaba dividido, pues mostraba su apoyo tanto a Lucía y Gemma como a Ale Salazar y, especialmente, a su 'local' Marta Marrero, por lo que por ese aspecto, las fuerzas estaban parejas. Sin embargo, en la pista también demostraron estarlo, con tres sets de auténtico lujo, pelea, garra y pasión (1-6, 6-4 y 7-6).

Golpearon primero Ale y Marta en un primer parcial inconmensurable, que borró del mapa a las chicas de Pablo Aimá y que les endosó tres roturas de servicio que serían más que fundamentales para marcharse con claridad en el marcador.

Sin embargo, a la vuelta del descanso entre sets, todo pareció cambiar y Lucía y Gemma salieron con otro semblante, un aire distinto, apretando los dientes y con un break a su favor. Todo se igualaba mucho más hasta que al final consiguieron una nueva rotura y empataban con ella el luminoso. El tercero, como no podía ser de totra manera, tuvo el mejor final posible, un tie break: 6-6 en el marcador y 8-7 para las chicas NOX en el desempate. Con el saque de Marrero y tras un intercambio en el que se podía cortar la tensión por no fallar, un globo forzado y corto de Marta le ponía en bandeja el smash ganador a Gemma, quien no fallaba y se abrazaba con su compañera en un abrazo lleno de felicidad por el pase a la final.

En el segundo envite del encuentro todo parecía cambiar, Lucía y Gemma empezaban rompiendo el saque de sus rivales en el nacimiento del set. Pero inmediatamente devolvían el golpe las jugadores de Juan Alday con el contra break. Todo igualado de nuevo. Así transcurrió la semifinal hasta colocar el 3-3. Punto en el que, de nuevo, la pareja 4 conseguía arrebatar el saque de Alejandra Salazar y poner una diferencia que a la postre iba ser definitiva. Cerrarían así una manga con un 6-4 para abocar el encuentro al desempate del tercero.

En la otra semifinal no hubo tanta pelea y es que, aunque Cata Tenorio y Victoria Iglesias lo intentaron, no pudieron contra el poderío exhibido por las gemelas Mapi y Majo Sánchez Alayeto (6-3 y 6-2). Mucha hambre de victoria y ganas de dar otra sorpresa no les faltaron a la andaluza y la argentina, pero las gemelas estuvieron inconmensurables, con muy poco bagaje de errores no forzados y con un pádel de gran altura.

Apenas se dejaron partes de la estadística sin dominar y supieron mandar en juego y marcador desde el principio, por lo que llegaran al partido decisivo mucho más descansadas, un factor que puede ser clave.

¿Desafiarán Lucía y Gemma el orden establecido y superarán a las Atómikas? Habrá que esperar para comprobarlo al término del partido masculino, que comenzará a las 12 por lo que, no antes de las 14, las chicas saltarán a la central del Real Club de Polo.

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