Iba para futbolista, pero al final se decantó por el tenis. Cuando no compite, disfruta de pasear con sus caballos. En 2016 ha ganado dos títulos. «No me obsesionan los números», dice

Roberto Bautista Agut (14/4/1988, Benlloch, Castellón) es el tenista español del momento. El pasado fin de semana ganó en Bulgaria su segundo título en 2016, después de haber conquistado el de Auckland en enero. De Sofía ha viajado a Rotterdam, donde ayer venció en primera ronda a Sousa (7-6, 1-6 y 6-3). Contesta por teléfono mientras se oyen las cremalleras de los raqueteros, que cierra para irse rápidamente a entrenar.

Con los viajes, ¿no pierden la noción de en qué ciudad están?

Perdemos la noción de los días, de los lugares... de todo. Estamos inmersos en nuestro mundo y no nos enteramos de nada. Es lo peor de nuestra profesión.

¿Cuántos días al año pasa en Castellón?

Pocos, pocos. Un mes en pretemporada en diciembre, y después semanas sueltas durante la temporada. El año pasado jugué unas 31 o 32 semanas.

¿Y qué es lo primero que hace cuando vuelve a casa?

Me gustan mucho los caballos, tengo tres, y cuando llego a casa estoy con ellos, paseo por la montaña... Es el momento perfecto para mi desconexión.

Todo eso sabe mejor ganando. ¡Menudo comienzo de año!

Ganar ayuda siempre a todo: a entrenar mejor, a jugar mejor, a llevar los torneos con mejor mentalidad y más tranquilidad.

¿Por qué ha explotado ahora?

Ya llevo tres o cuatro años a gran nivel. Mi objetivo era acercarme a mi mejor ranking, que había sido 14; ahora estoy 17 y poco a poco las cosas van saliendo. Cada jugador tiene su evolución. Algunos como Rafa [Nadal] con 18 años ya estaban en rondas finales de torneos grandes y a otros les cuesta un poco más. No se pueden hacer comparaciones.

Iba para futbolista, llegó a jugar en las categorías inferiores del Villarreal, pero al final optó por el tenis...

Son deportes diferentes. Jugaba de delantero. Una de las cosas por las que elegí el tenis es porque depende más de uno mismo, no de terceras personas, de compañeros... Aunque la presión es mucho mayor a la del fútbol.

¿Sufre viendo al Villarreal?

Se sufre, pero como sufro tanto en mi carrera voy a ver el fútbol para desconectar y para disfrutar, no para pasarlo mal. Una cosa es querer que tu equipo gane y otra volverte loco si gana o pierde.

¿Ha pensado cómo hubiera sido su carrera de futbolista?

Incluso tuve mis dudas después de haber decidido jugar a tenis. Tenía compañeros con buenos contratos en el Villarreal, en el Valencia... y no era fácil al ver que los principios del tenis son tan duros: momentos de muchos viajes, de pasarlo mal económicamente... Hasta que se ve la luz en el tenis cuesta mucho.

¿Alguna vez hay que pagar por competir?

Muchos años hay que poner dinero de tu bolsillo. El tenis en los principios es muy caro. Hasta que no estás en el circuito ATP no es nada rentable.

Su manera de coger la raqueta es algo diferente a la típica de los españoles...

Es una empuñadura un poco más Este y creo que eso me ayuda a jugar bien en todas las pistas (ha ganado un título en todas las superficies: a los dos de este año, en dura, suma Stuttgart, en tierra, y Hertogenbosch, en hierba). De pequeño me decían que con esa empuñadura era complicado que jugara bien, pero creo que cada uno tiene su manera de jugar y eso es innato y no se debe tocar.

¿Ha cambiado el tenis?

Es verdad que las pistas rápidas antes eran más rápidas que las de ahora, pero nos tiramos prácticamente el 70 por ciento del año jugando en pista dura y no tienes más remedio que adaptarte y aprender a jugar.

En tenis, ¿es la cabeza tan importante como el talento?

El tenis es un deporte emocional. Cada tenista tiene sus armas, unos llegan arriba basándose más en la lucha o la fuerza mental, y están más limitados, entre comillas, técnicamente; y otros tienen más facilidad de golpes, de saque. Pero el talento son las dos cosas. Se llama talento a la técnica, pero también existe el talento mental.

¿Por qué Djokovic es superior?

Tenísticamente es un talento sobrenatural, pero mentalmente está un escalón por encima. Tiene pocos días malos, o los que tiene se le notan poco, y su nivel medio es superior al muy alto de otros.

¿Tiene rutinas antes de jugar?

Los jugadores de tenis somos todo rutinas: de vestuarios, de duchas, de restaurantes... Solemos repetirnos mucho cuando algo sale bien.

¿Cree que se hace suficiente contra las apuestas ilegales?

Yo creo que en el circuito ATP no pasa mucho, pero se deberían tomar más precauciones, sobre todo no dejar apostar en torneos de bajo nivel económico.