La peor pesadilla de Carlos Alcaraz

Carlos Alcaraz ha jugado 47 partidos esta temporada. Su balance es sobresaliente: 41 victorias y seis derrotas. El murciano se encuentra en las semifinales del torneo de Umag, el torneo con el que hace un año estrenó su palmarés en la ATP. Carlitos sólo tiene por delante en número de victorias a Stefanos Tsitsipas y la media docena de derrotas que ha sufrido esta marcada por una condición muy particular. Tres de las seis llegaron ante tenistas italianos: la primera fue en la tercera ronda del Open de Australia ante Berrettini y las dos más recientes llegaron ante Sinner (cuarta ronda de Wimbledon) y Musetti (final de Hamburgo). Por eso Carlitos afronta con cautela la semifinal en Umag ante Giulio Zeppieri, jugador procedente de la fase previa. Una victoria permitiría al murciano, además de alcanzar una nueva final, convertirse en el número cuatro del mundo.

Alcaraz ya ha afirmado en numerosas ocasiones que su ambición es convertirse en número uno del mundo. Esta semana ha accedido por primera vez al “top 5″ y él asegura que eso lo único que significa que todavía tiene a cuatro jugadores por delante. Si derrota a Zeppieri, al margen de lo que sucediera en la final, previsiblemente ante Sinner, se convertiría en el cuarto jugador del ranking sólo por detrás de Medvedev, Zverev y Nadal. En la Carrera de Campeones, la clasificación de 2022, seguiría como número dos sólo por detrás de Rafa. “Significaría muchísimo poder alcanzar el número 4 en el ranking, tener la opción de conseguirlo. Es increíble para mí. Creo que estoy jugando bastante bien. Me siento realmente cómodo jugando aquí, tengo mucha confianza ahora mismo”, declaraba a la web de la ATP después de superar los cuartos de final del torneo croata.

En Umag, tres de los cuatro supervivientes el fin de semana son italianos. Alcaraz es la excepción en el cuadro. Si el murciano derrota a Zeppieri (17:00) se enfrentaría al ganador del partido entre Franco Agamenone, otro jugador procedente de la previa, o Jannik Sinner, su verdugo en la hierba de Londres: “Va a ser una ronda complicada. Tengo pesadillas con los jugadores italianos, pero intentaré mostrar mi mejor versión y alcanzar la final”, afirma Carlitos. Después del torneo en los Balcanes, Alcaraz afrontará la gira norteamericana en pista rápida. En sus planes está competir en los dos Masters 1.000, Montreal y Cincinnati, previos al Abierto de Estados Unidos.