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El mejor Nadal del año se cita con Murray en la final de Madrid

Recupera su versión más contundente para avasallar con la derecha a Berdych. En la final espera Murray

Rafa Nadal celebra su victoria de semifinales frente a Berdych
Rafa Nadal celebra su victoria de semifinales frente a Berdychlarazon

Recupera su versión más contundente para avasallar con la derecha a Berdych. En la final espera Murray

¡Al fin! Nadal disputará hoy ante Murray –6-3 y 6-4 a Nishikori– su primera final de un Masters 1.000 en 2015 porque por primera vez este año se pareció durante muchos minutos al jugador que no hace tanto tiempo era el número uno del mundo. Tomas Berdych sufrió la mejor versión de la temporada de Rafa en un partido que, visto su ejercicio hasta ahora, no podía ser mejor. A Rafa le funcionó la derecha invertida como en los mejores momentos, se movió bien con más de 30 grados en la pista, clavó «passings», su servicio no le falló nunca... Fue el Nadal más perfecto posible, no se le podía pedir más. Así se explica su victoria por 7-6 (7/3) y 6-1 ante un rival que hace menos de cuatro meses le barrió en Australia. La celebración hizo evidente la trascendencia de la victoria: puños cerrados, carrerita, salto en el centro de la pista y agradecimientos para todos. Lo importante no es tanto la clasificación para la final, que, por supuesto, también; lo fundamental es que Rafa se sintió de verdad cómodo sobre la arcilla roja. Y eso es incluso más trascendente que el posible título de hoy. Se sintió como hacía demasiado tiempo que no se encontraba. Ahí cabe enmarcar su reflexión más inmediata. Llevaba toda la semana sin que se le pasara por la cabeza el Foro Itálico y mucho menos todavía Roland Garros. No quería ni oírlo. Torcía el gesto cuando se le mencionaba, pero... «Madrid me sirvió de mucho el año pasado y este año está sirviendo de mucho también», dijo a LaSexta a pie de pista pensando en lo que viene. Era su forma de reconocer que los planes se van cumpliendo, que el rodaje para París va por el buen camino. Johnson y Bolelli fueron dos bromas. Ante Dimitrov acabó satisfecho y ante Berdych incluso se sorprendió a sí mismo. «Este ha sido uno de los mejores partidos que he jugado este año. Esta semana era vital para mí y el hecho de estar en la final es inmejorable, y más viniendo como venía. Hace una semana hubiera firmado estar en la final y perderla», dijo.

Berdych ofreció resistencia mientras le sostuvo su servicio. En el primer set, los cañonazos a más de 200 kilómetros por hora evitaron una «muerte» prematura del checo. Nadal arrancó muy sólido y terminó rozando la perfección con golpes de videojuego desde el fondo de la pista. Su derecha invertida es letal y hacía meses que no se veía una secuencia tan continuada de ese golpe como ayer. El mejor Nadal es la raqueta que mejor se defiende del mundo y, además, es el jugador que convierte golpes que parecen inofensivos en «winnners» ante los que ningún rival encuentra respuesta. Dos de esas derechas le sirvieron para resolver el «tie-break» de la primera manga. Lo que sucedió luego fue un clínic con su «drive». «Cuando mi derecha es vulgar, me convierto en un jugador vulgar», aseguró después de caer ante Fognini en Barcelona. Su derecha ayer fue letal, lo más alejada posible de la vulgaridad. Su control de los intercambios y el mandar la bola siempre al sitio donde hacía más daño explican el 6-1 con el que resolvió la semifinal. «Creo que he hecho el mejor partido del torneo sin duda, he apretado las cosas por donde tenía que apretar y desde luego hacía mucho tiempo que no jugaba a este nivel. Es una victoria de las más importantes para mí desde hace tiempo», confesó.

Rafa necesitaba una victoria como la que llegó ante Berdych. Su palco también lo celebró sin disimulo. Es su triunfo de más prestigio del año y revela que los diez días que lleva entrenándose y jugando en Madrid han servido para mucho. «El trabajo importante de la semana está hecho, es decir: ir a más, recuperar sensaciones y recuperar el nivel alto, que ya lo había hecho los últimos días, cambiando cosas, subiendo el nivel de acuerdo a la exigencia del rival», dijo. Rafa no pudo terminar de una manera más sincera: «Desde una visión honesta y clara, he jugado a un nivel alto, no puedo aspirar a más alto. Hay que mantener el nivel de hoy». El único disgusto llegó lejos de la Caja Mágica. Rafa se presentó en el Bernabéu y la cosa acabó como acabó.

--RESULTADOS:

-Semifinales.

Andy Murray (GBR/N.2) a Kei Nishikori (JAP/N.4) 6-3, 6-4.

RAFA NADAL (ESP/N.3) a Tomas Berdych (RCH/N.6) 7-6(3), 6-1.