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La cima de Murray

Murray es desde hoy el número 1 del mundo
Murray es desde hoy el número 1 del mundolarazon

¿Recuerdan a Andy Roddick? Sí, aquel cañonero estadounidense que siempre llevaba gorra y una camiseta ancha que se arremangaba antes de cada saque a más de 200 kilómetros por hora.

¿Recuerdan a Andy Roddick? Sí, aquel cañonero estadounidense que siempre llevaba gorra y una camiseta ancha que se arremangaba antes de cada saque a más de 200 kilómetros por hora. Pues fue el último número uno del mundo antes de la dictadura del trío que ha dominado el tenis los últimos doce años: Federer, Nadal y Djokovic. Una tiranía sin parangón en el mundo de la raqueta que acabó el pasado fin de semana con la caída del serbio y el ascenso al primer puesto de la ATP del escocés Andy Murray. Lo ha hecho a los 29 años, cuando la mayoría de los tenistas comienza su decadencia, excepción hecha de tipos como Jimmy Connors, André Agassi o el mismo Federer, capaces de resistir en la élite más allá de la treintena. Murray ha solidificado su gran triunfo personal en una segunda parte del año excepcional, en la inesperada bajada de rendimiento de Djokovic y en la incomparecencia por diversos problemas físicos de Federer y Nadal.

- El patito feo

El escocés también conoce el dolor, pero de otro tipo. El de ser la eterna alternativa, aquel tenista con mucha clase, pero con escaso carácter competitivo, el patito feo entre los mejores. Ocho finales de «Grand Slam» perdidas y tres ganadas le contemplan. No es la mejor hoja de servicios, pero en el tiempo en el que le ha tocado competir tiene un mérito indudable. Algo así como ganar el Balón de Oro a Messi o Cristiano, bestias del fútbol que se reparten el trofeo desde 2008. El próximo año tenístico será apasionante. Con Murray a su mejor nivel, los tres tenores esperan su turno para volver a la carga. De Djokovic no se duda, volverá a estar para ganarlo todo y acercarse al récord de «Grandes» de Federer. El suizo, con 35 años, aspira todavía a sumar algún «Grand Slam» más a su brutal colección. Y Rafa, nuestro Rafa, insiste en que dará todo para volver a ganar. ¿Por qué no soñar?