Un fútbol para todos

Rubiales presentó ayer su candidatura a la presidencia de la Federación con el fútbol modesto y el femenino como prioridades.

Se apagaron las luces, sonó la música de Queen –«Don’t stop me now»– y Luis Rubiales apareció para presentar su candidatura a la presidencia de la Federación acompañado por Michael Robinson. «Ganar» se podía leer en un atril. En un panel al fondo, el resumen de las ideas del hasta hace unas semanas presidente de la AFE. La palabra «Transparencia» en grande. Crecer, mujer, fútbol modesto, humildad y varios conceptos más la acompañaban.

Rubiales está convencido de que será el próximo presidente de la Federación a partir del 16 de enero, la fecha en la que está fijada la moción de censura al presidente ahora suspendido Ángel María Villar. Al candidato no le gusta la fecha. «Hay jornada de Copa y de fútbol sala. Debería hacerse para que pudiera ir todo el mundo. Porque si no vas es como si votaras ‘‘no’’», lamenta.

«La moción de censura es la única manera que hemos encontrado de ejercer la democracia», afirma. Y asegura que si se repitieran las elecciones también se presentaría aunque considera que la Federación «debe aprovechar las herramientas que tiene». Y no se plantea otra posibilidad que no sea ganar la moción. «No lo contemplo. Vamos a ganar. Lo pone aquí», dijo señalando al atril. Aunque añade: «No he venido a estar aquí 30 años».

Tampoco se plantea la posibilidad de que España no dispute el Mundial. «Hablo con FIFA y no puedo decir que tenga una tranquilidad, pero conociendo a sus dirigentes y al presidente no me creo que se vaya a producir esto. Me han pedido un informe al respecto y voy a dar mi opinión a FIFA», afirma. «Ellos piensan que ésta es la asamblea que representa al fútbol español, no creen que haya nada que cambiar. Elegir un presidente sí nos dotará de credibilidad y nos permitirá empezar a trabajar de cero, tenemos mucho margen de mejora», dice. «Necesitamos una Federación fuerte y ahora tenemos una Federación débil porque no tenemos un presidente elegido», añade.

A Rubiales lo arropaban representantes de las asociaciones de jugadores de distintos deportes: Alfonso Reyes (baloncesto), Claudio Gómez (balonmano), Natalia Orive (fútbol sala femenino), Antonio García Plata (fútbol sala) y José Luis de Santos (ciclismo).

La pretensión de Rubiales es apoyar a los que más lo necesitan, el fútbol modesto, el femenino, el fútbol sala y el fútbol playa. «No entiendo que no haya habido nunca una mujer ocupando una vicepresidencia», dice. Una de sus ideas es dejar una franja horaria del fin de semana «de libre disposición». Dos horas en las que no haya fútbol profesional para intentar relanzar el fútbol modesto. «En Inglaterra lo han hecho y la League One, el equivalente a la Segunda B, y ha pasado de una media de 1.000 espectadores a 6.000 o 7.000», afirma.

Rubiales defiende la aplicación del VAR, aunque prefiere ir poco a poco. «Soy partidario primero de aplicarlo para aquellas cosas que no son objeto de interpretación y luego llegarán las interpretables», dice. Primero el ojo de halcón, después lo demás.