España se autoexcluye del proyecto de futuro helicóptero europeo para la OTAN
Francia, Alemania, Grecia, Italia y Reino Unido lanzaron el programa al que ahora se ha unido Países Bajos y por el que también mostró interés Madrid, sin que se haya concretado hasta ahora
La OTAN ha hecho público que seis de sus miembros, Francia, Alemania, Grecia, Italia, Reino Unido y Países Bajos, han acordado desembolsar de 26,7 para definir el futuro de sus flotas de helicópteros en el marco del proyecto Next Generation Rotorcraft Capability (NGRC). Este programa dio sus primeros pasos en en noviembre de 2020 con los cinco primeros países citados, a los que ahora se ha sumado Países Bajos: todos ellos suscribieron entonces un plan con este objetivo bajo la fórmula de proyecto de alta visibilidad (HVP) de la OTAN.
También en este contexto, a principios del año pasado el director de Política de Productores y Estrategias de Airbus Helicopters, Jerome Combe, propuso a la firma italiana Leonardo unir esfuerzos de cara al programa NGRC. En este mismo marco se encuentran los planes liderados por la Alianza Atlántica para el desarrollo de una aeronave de ala rotatoria a lo largo de la próxima década y media, al que también aspiran las compañías estadounidenses Sikorsky y Boeing. Estas dos firmas dieron a conocer en enero de 2021 su oferta conjunta para la competencia de futura aeronave de asalto de largo alcance (FLRAA) del Ejército de Estados Unidos).
Con este enfoque se augura una competición en el sector protagonizada por las compañías estadounidenses y europeas del sector, en el que se deberá dilucidar de qué lado del Atlántico será el producto que alcance el éxito.
Madrid, fuera de momento
Hace un año trascendió el interés de Países Bajos y España por sumar sus fuerzas a la iniciativa de los cinco países europeos que suscribieron el acuerdo original en el último trimestre de 2020. Ahora, el anuncio oficial fechado por la OTAN el jueves, confirma la entrada de Ámsterdam al tiempo que evidencia que Madrid, al menos de momento, no ha entrado en este proyecto que tiene el horizonte puesto en el final del ciclo de vida de numerosos helicópteros actuales en el período comprendido entre 2035 y 2040 “y más allá, con la consiguiente necesidad de reemplazos”, de acuerdo con sus artífices.
El comunicado emitido por la organización ahora sobre este compromiso desataca que, en colaboración con la industria, estos seis países partirán ahora “de una hoja en blanco para explorar cómo adaptar sus necesidades a la última tecnología del mercado, estudiando opciones como la propulsión híbrida y eléctrica, una arquitectura de sistemas abierta y sistemática, y el suministro de características de vuelo radicalmente mejoradas”.
En palabras del vicesecretario general de la OTAN, Mircea Geoană, “este es un claro ejemplo de la colaboración entre la OTAN y los aliados para aprovechar la rápida evolución de la tecnología en beneficio de nuestras capacidades militares. Al invertir nuestros recursos y canalizar nuestro desarrollo a través de un marco multinacional, nos aseguramos de que los aliados están equipados con el mejor material disponible”.