Estos son los meses y días de la semana en los que somos más impuntuales

La pandemia del coronavirus trajo a la fuerza el teletrabajo a la vida de miles de personas alrededor del globo, haciendo que se puedan llevar a cabo tareas laborales desde la comodidad de nuestros hogares. No obstante, pese a que esta nueva realidad ha llegado para quedarse, en la actualidad la presencialidad en las oficinas se ha ido recuperando paulatinamente incrementando así los gastos de los empleados en desplazamiento o comida e incluso existiendo la posibilidad de ausentarnos o llegar tarde a nuestro puesto de trabajo.

Las mayores tasas de absentismo justificadas se dan los lunes y viernes, según los datos obtenidos por la empresa de software tecnológico GeoVictoria. “Esto quiere decir que, normalmente, pedimos esos días con más frecuencia como vacaciones o permisos de otro tipo, como en el caso de mudanza o médico. Sin embargo, el dato más alarmante es que el absentismo injustificado también se eleva, llegando incluso a duplicar el justificado”, tal y como explica la directora comercial de esta empresa, Iria Najarro.

En este contexto, los lunes el absentismo justificado aumenta en un 8,77%, mientras que el injustificado duplica esta cifra, situándose en un 17,87%. Por su parte, los viernes registran un porcentaje similar al del primer día de la semana, ya que la tasa de absentismo justificado es del 8,7%, ascendiendo hasta el 17,09% en los casos injustificados.

En cambio, si en la jornada laboral se incluyen los sábados y domingos, los datos revelan otros datos llamativos: “Los empleados que trabajan los fines de semana llegan más atrasados a sus puestos, pudiendo deberse a que existe una menor supervisión por parte de la empresa y se encuentran menos empleados. Sin embargo, la tasa de absentismo justificada es menor, de un 5,55%” añade Najarro.

En agosto, septiembre y diciembre la impuntualidad se dispara

Asimismo, al igual que ocurre con los días de la semana, el mes en el que nos encontremos también tendrá un efecto positivo o negativo en nuestro comportamiento laboral y en cuanto a impuntualidad se refiere. Así, el mayor porcentaje de personas que llegan tarde a su puesto de trabajo se produce en el segundo semestre del año, según los datos de GeoVictoria.

“Los datos aportados inciden en que somos más puntuales en los meses de enero y febrero, pudiendo hacer referencia a los buenos propósitos del nuevo año. Por otro lado, lo somos menos en agosto, septiembre y diciembre, meses en los que volvemos de vacaciones de verano y el ritmo de rutina cambia. Además de que, a finales de año, se puede notar un mayor cansancio que se suma a las cenas y los eventos navideños, provocando una de las tasas de atrasos más altas” explica la directora comercial.

En este contexto, en el mes de enero y febrero la impuntualidad de los trabajadores es de tan solo un 7,24% y un 7,91%, respectivamente; mientras que en el mes de agosto esta cifra se duplica ascendiendo hasta un 13,93%, seguido de cerca por el mes de diciembre que se sitúa en un 13,61%.