Cinco entidades se hacen con el 52% del capital del «banco malo»

La Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la reestructuración Bancaria (Sareb) cerró ayer la primera de sus tres ampliaciones de capital previstas, con la que ha dado entrada a cinco entidades financieras que tendrán el 52% del capital 430 millones), quedando el restante 48% (397 millones) en poder del FROB. Santander, con 164 millones; Caixabank, con 118; Banco Sabadell, con 66; Banco Popular, con 57, y Kutxabank, con 25, se han convertido en los primeros accionistas privados del denominado «banco malo», que aspira a contar con unos fondos propios de 5.000 millones. En la madrugada de ayer se consiguió poner el primer pilar, suficiente para que la sociedad comience a funcionar y a recibir los activos tóxicos de la banca nacionalizada.

El primer paso

Antes de final de año, se realizará una segunda colocación de acciones y de deuda subordinada, que obligará a cada accionista a multiplicar por cuatro su inversión. Será en este segundo tramo cuando entren otros accionistas minoritarios, como Cajamar Caja Rural, con 61 millones; Bankinter, con 54; Deutsche Bank ,con 15, así como entidades aseguradoras, como AXA, que invertirá 10 millones. Quedará una tercera ampliación de capital para febrero. La principal ausencia es la de BBVA.

Al final del proceso, Banco Santander habrá comprometido una inversión en la Sareb de hasta 850 millones de euros, que representará una participación accionarial de aproximadamente el 16%. Caixabank tendrá a 606 millones de euros, Sabadell, 335 millones, Popular, 288 millones, y Kutxabank, 128 millones. De estas cantidades, únicamente el 25% será aportación en efectivo, y el 75 % en forma de deuda subordinada, que será emitida en las próximas semanas.

Antes de final de año, los cuatro bancos nacionalizados traspasarán sus activos inmobiliarios a la Sareb, por valor de 44.000 millones de euros. Al final gestionará en torno a 59.000 millones.