El Gobierno incluirá un impuestazo al diésel del 31% en los presupuestos de 2019

Sánchez pretende recaudar unos 2.000 millones más al subir diez céntimos las tasas del gasóleo.

Los Gobiernos pasan y cambian de muda y de color, pero hay una tónica que se mantiene inalterable: el incontenible afán recaudatorio. Da igual el pretexto, en este caso la manida transición ecológica, para meter aún más la mano en los bolsillos de los contribuyetes, que harán frente a una subida de diez céntimos en el impuesto al diésel si se aprueban finalmente los Presupuestos Generales del Estado para 2019. El Gobierno de Pedro Sánchez indicó ayer que pretende incluir esta nueva carga impositiva en los PGE que presentará al regreso de las vacaciones veraniegas. La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, reveló en una entrevista a Europa Press, que aunque el Ejecutivo tiene hasta el 30 de septiembre para presentar el proyecto de PGE, se retrasará «un poco, no mucho» y anunció que, de la mano de los PGE, vendrán diferentes medidas fiscales. «Se ha hablado mucho del diésel, pero la realidad es que todavía no se ha puesto encima de la mesa un posible borrador para ver, con los sectores implicados, la letra pequeña de lo que será el impuesto al diésel», añadió la ministra, al tiempo que resaltó que el Ejecutivo tiene que ir «más deprisa» en la transición a la reducción de emisiones, tras dispararse las de dióxido de carbono (CO2).

Maroto avanzó que ya se trabaja en un borrador de la nueva fiscalidad al diésel que se analizará junto con el sector del automóvil, para lograr un «buen impuesto» que permita al sector afrontar este nuevo golpe.

El Gobierno estudia equiparar el impuesto del gasóleo, que está en 30,7 céntimos el litro, con el de la gasolina, que es de 40,25 céntimos el litro, para recaudar algo más de 2.000 millones de euros. Un alza del 31%.

El Comité de Expertos sobre escenarios para la Transición Energética sugirió ya al anterior Gobierno popular subir el impuesto de circulación a los coches diésel para fomentar la movilidad sostenible, así como un encarecimiento del gasóleo del 28,6%, entre otras medidas.