Fórmulas y servicios flexibles adaptados a las nuevas demandas

Pese a la buena evolución, el sector del renting no cae, ni mucho menos, en la autocomplacencia, y sus profesionales insisten en la necesidad de innovar y buscar nuevas fórmulas adaptadas a unos usuarios que ya no buscan tanto un vehículo como soluciones de movilidad, y que, además, sean lo más flexibles posibles. Y es que, al igual que ha variado la estructura de su base de cliente, también lo están haciendo las demandas. De esta forma, está surgiendo un nuevo modelo de negocio, el que se deriva de la economía colaborativa y de las exigencias en materia de movilidad y sostenibilidad.

El usuario ha cambiado su mentalidad con respecto al automóvil. Para el mismo, el coche ya no es una necesidad, sino que busca la solución que mejor se adapta a las exigencias de cada momento. Por ello, la flexibilidad se ha convertido en una de las claves que explican el crecimiento presente y sobre la que se sustentará también el del futuro. En este sentido, la tendencia, según apuntan los expertos, es ir hacia el pago por uso, y a la búsqueda de soluciones temporales de movilidad. «Hace unos años, los actores del sector del renting éramos básicamente gestores de flotas, con un comportamiento más bien reactivo ante las demandas de servicio de nuestros clientes. En la actualidad, somos proactivos gestores de movilidad, y nos preocupamos de nuestros clientes y conductores trabajando en adelantarnos a sus necesidades con foco en la flexibilidad y en la personalización», sostiene Rocío Carrascosa, directora general de Alphabet España.

Empresas de «car sharing» se están uniendo cada vez más a compañías de renting para contribuir a la movilidad sin impacto medioambiental. «El renting es un actor que está facilitando los procesos de transformación en la economía y la sociedad y sin riesgo, ya que son las propias empresas las que asumen las incertidumbres derivadas, por ejemplo, del coche eléctrico. Las soluciones del Renting Flexible de Northgate reflejan las tendencias y demandas actuales. Así, nuestros clientes pueden disponer de un vehículo que se adapte a sus necesidades en cada momento en tan sólo 24 horas. Además, lo pueden devolver cuando deseen, así como cambiarlo sin penalización alguna», manifiesta Fernando Cogollos, CEO de Northgate.

Trajes a medida

La intermodalidad es una de las soluciones para la movilidad, a juicio de Carrascosa. «Alphabet ya ha puesto a disposición de los usuarios en varios mercados AlphaFlex, una solución corporativa que permite combinar diversas formas de transporte: desde el coche compartido hasta el transporte público, la bicicleta o el taxi. Se trata de paquetes de movilidad personalizados, que atienden a las solicitudes de cada usuario y todo ello por una misma cuota. Es como si se tratase de un traje a medida», detalla .

Además, la industria está siendo uno de los grandes impulsores del coche eléctrico. Y como muestra, un botón. Durante 2017, se matricularon en nuestro país 8.428 vehículos de las distintas modalidades de eléctricos (eléctrico puro, de autonomía extendida, híbrido enchufable gasolina e híbrido enchufable diésel). De esa cantidad, 2.498 unidades correspondieron a empresas de renting, lo que representa el 29,64% del total. El último estudio del Foro de Movilidad, promovido por Alphabet, concluye que más del 69% de los españoles cree que el coche eléctrico es la solución ideal para la movilidad en las ciudades. Por ello, la compañía se ha centrado en ofrecer a sus clientes soluciones de movilidad sostenibles e innovadoras, como AlphaElectric. «Con esta solución, trabajamos para optimizar la movilidad eléctrica y ofrecer productos de vanguardia que permitan a nuestros clientes tener una flota que responda a su compromiso de sostenibilidad. También ofrecemos AlphaCity, nuestro servicio de coche compartido para empresas, que cuenta con una creciente demanda y que permite a empresas ofrecer un ‘‘carsharing’’ que puede ser 100% eléctrico, la movilidad eléctrico-compartida», destaca la responsable de Alphabet.

Junto al coche eléctrico, las compañías están también promoviendo otras tecnología, como son los vehículos propulsados por gas, ya sea licuado o natural, que también cuentan con la consideración ECO. A juicio de Fernando Cogollos, el vehículos de gas cuenta con algunas ventajas respecto al eléctrico. «En Northgate, estamos convencidos de que el coche eléctrico puede convivir con otras tecnologías que generen, en estos momentos, menos inseguridades. En este sentido, estamos apostando por el gas. Se trata de coches que poseen la etiqueta ECO y que, además, son más baratos y versátiles. Cuentan con mayor autonomía, disponen de más puntos de repostaje y tienen un valor residual más estable que el que puede tener en la actualidad un coche eléctrico», manifiesta.