Garamendi carga contra el "creciente intervencionismo" del Gobierno y contra la "carga fiscal" que abarata el valor de las empresas

El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha aprovechado el anuncio de la OPA hostil lanzada por BBVA para hacerse con el control del Banco Sabadell para mandar un recado al Gobierno y recordarle que el valor en bolsa de las empresas españolas es menor que el que tendrían "si fluyeran" y no tuvieran la gran la carga fiscal que sufren, que "no les permite que ganen dinero" y provoca que su valor en bolsa sea mucho menor, en referencia a los gravámenes extraordinarios que soportan la banca y las grandes energéticas. De estas decisiones llegan consecuencias".

Garamendi, en el "V Foro Internacional Expansión", ha pedido "respeto por las decisiones que quieran tomar las empresas desde el ámbito privado" y ha reclamado al Gobierno que deje "a las empresas trabajar y a los accionistas decidir", después de que desde el Ministerio de Economía hayan rechazado la operación "tanto en la forma como en el fondo", tras considerar que "introduce efectos lesivos potenciales en el sistema financiero español". Además han apuntado que "supondría un incremento en el nivel de concentración que podría tener un impacto negativo en el empleo y en la prestación de servicios financieros".

El presidente de la patronal ha cargado también contra el "creciente intervencionismo" del Ejecutivo por la entrada del Estado en el capital de algunas empresas, como está pasando con la SEPI en Telefónica, o a la tutela de algunas operaciones, como en Talgo. Ese "intervencionismo" entiende que debería centrarse en "vigilar muy bien no tanto la entrada como la gestión" de capital extranjero en empresas españolas, ya que "no sería bueno para el país" que el Estado vaya cogiendo peso en estas empresas. "Hay que proteger a las empresas, a los accionistas, cuidarlas entre algodones", ha dicho Garamendi.