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Análisis

La guerra arancelaria de Trump y su impacto global: recesión, inflación y pérdida de miles de empleos

Si se mantiene en el tiempo, debilitará el proceso de globalización y tendrá graves efectos sobre la economía mundial

VÍDEO: Economía/Macro.- La Casa Blanca reitera que los aranceles de este miércoles "entrarán en vigor de inmediato" EUROPAPRESS

La economía global del siglo XXI está más interconectada que nunca y las decisiones de política comercial tienen efectos que trascienden las fronteras nacionales. Y, en este contexto, las relaciones comerciales internacionales se han intensificado a lo largo de las últimas décadas, permitiendo que los bienes, servicios, capitales y tecnologías circulen por el mundo a niveles sin precedentes, mejorando el bienestar de los consumidores de todo el mundo, que tienen acceso a una amplia gama de productos a precios muy competitivos.

Sin embargo, asistimos a un posible proceso de fragmentación y desconexión de esa globalización debido a la agresiva guerra comercial que se está desatando con la imposición de elevados aranceles sobre importaciones clave, lo que afecta a todo el mundo, pero especialmente a Europa, Canadá, México y China, que se encuentran en el ojo del huracán, pero también al precursor de estos aranceles, Estados Unidos, por el efecto bumerán.

Entre los argumentos para aplicar barreras comerciales destaca la protección de la industria nacional por la que los gobiernos buscan defender a las empresas locales frente a la competencia extranjera, permitiéndoles crecer en un entorno de menor presión competitiva. Además, los aranceles pueden representar una fuente adicional de recaudación fiscal, aunque es un tema discutible y, por último, se utilizan como una herramienta diplomática de negociación o represalia frente a prácticas comerciales que se consideran injustas y, por ello, para muchos, los aranceles son considerados como un acto de guerra económica. Si bien estas razones pueden ser válidas en ciertos contextos, es clave entender que la implementación de aranceles no está exenta de riesgos y puede generar efectos contraproducentes, como los siguientes:

Represalias

Cuando un país decide implementar aranceles, las naciones afectadas suelen aplicar medidas de represalia, imponiendo a su vez aranceles sobre productos del país inicial, tal y como estamos viviendo. Esta guerra comercial puede escalar rápidamente, afectando a múltiples sectores económicos, deteriorando las relaciones diplomáticas y reduciendo el volumen de comercio internacional, provocando una disminución en la eficiencia global y, en casos extremos, llevando a recesiones económicas.

Inflación

Los aranceles son un arma de doble filo ya que son impuestos que impone un país a las importaciones de bienes y que se calculan como un porcentaje de su valor, por tanto, no son pagados por los países exportadores sino por las compañías importadoras del país que los impone y que finalmente se trasladan al precio que pagan sus consumidores, lo que se traduce en una inflación generalizada, reduciendo el poder adquisitivo de la población, en especial de las clases media y baja porque son quienes destinan una mayor parte de sus ingresos a la compra de bienes de primera necesidad. En este sentido, los aranceles pueden agravar las desigualdades económicas y generar tensiones sociales al encarecer el precio de productos básicos.

Distorsiones del mercado

Al encarecer los productos importados, se altera la competencia natural entre empresas, lo que suele conducir a una asignación ineficiente de recursos, ya que las empresas nacionales, protegidas por aranceles, pueden no tener el mismo incentivo para innovar o mejorar sus procesos productivos. Algunos economistas como Adam Smith y David Ricardo argumentaron que la especialización y el libre comercio maximizan la eficiencia y el bienestar global y Milton Friedman sostenía que estas distorsiones impiden el funcionamiento óptimo del sistema económico y socavan la competencia que estimula la innovación.

Impacto en las cadenas de valor

En la actualidad, las cadenas de valor se han fragmentado a nivel global, aunque están interconectadas y cada país aporta una parte específica en el proceso de producción de bienes y servicios. Los aranceles pueden interrumpir este flujo, encareciendo materiales esenciales que se importan, afectando a la competitividad del producto final, de modo que aparece un importante efecto dominó a través de las cadenas pues los diferentes componentes necesarios en la fabricación de un producto van cruzando fronteras en múltiples ocasiones, encareciendo de forma exponencial el coste.

Desincentivo a la inversión

La incertidumbre y la volatilidad generadas por políticas arancelarias pueden actuar como freno para la inversión extranjera directa pues los inversores buscan entornos estables y predecibles para desarrollar proyectos a largo plazo. Un régimen arancelario impredecible o en constante cambio desincentiva la inversión, afectando el desarrollo industrial y tecnológico de un país, lo que limita la creación de empleo, la transferencia de conocimientos y la competitividad.

Efectos sobre el sistema financiero

Dada la incertidumbre y volatilidad que se genera en los mercados y por la caída en la actividad internacional que tiene un impacto sobre los sistemas de pagos y el movimiento de dinero, lo que afecta al sector bancario y asegurador.

Así pues, la guerra arancelaria que vivimos, de mantenerse en el tiempo, debilita el proceso de globalización económica, desatando efectos negativos que van desde procesos de recesión, desaceleración, inflación y pérdida de miles de empleos a nivel global, frenando el crecimiento sostenible y comprometiendo el bienestar económico y social. Algunos economistas señalan las complejidades de equilibrar intereses nacionales con la integración global, pero es fundamental que busquemos soluciones que mejoren el bienestar de todos conforme a las enseñanzas de economistas como Adam Smith, David Ricardo, Milton Friedman y Paul Krugman donde el libre comercio y la competencia son motores esenciales del progreso económico y también del bienestar social.