Pesca
Los 27 rechazan la primera propuesta de acuerdo para el reparto de la pesca de 2013 y retoman negociaciones
Los ministros de Pesca de la Unión Europea han rechazado la primera propuesta de acuerdo para el reparto de las posibilidades de pesca para la flota comunitaria en 2013 que presentó la presidencia chipriota de la UE poco antes de las 16:00 horas, por lo que se reanudan las negociaciones para tratar de acercar posturas.
Las delegaciones han recibido pasadas las 15:30 horas un primer documento "con el que nadie está contento", han informado a Europa Press fuentes conocedoras de la negociación. La propuesta es "insatisfactoria"para España, según fuentes diplomáticas.
El documento ha llegado con varias horas de retraso y después de una primera jornada, el martes, en la que la comisaria de Pesca, Maria Damanaki, se reunió de manera bilateral con cada ministro para conocer las líneas rojas y prioridades de cada país.
Con el rechazo del primer texto, los llamados 'confesionarios' con cada delegación se reanudan para tratar de acercar posiciones y trabajar en una nueva propuesta a lo largo de la tarde, con probabilidad de que se alargue de madrugada.
En la primera jornada de negociaciones, el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, criticó "las reducciones generalizadas"que defiende Damanaki y las consideró "muy lesivas"para la flota española, sobre todo en stocks como la merluza del Norte, para la que se planteaba un recorte de más del 30 por ciento, o el gallo y el rape, de un 20 por ciento.
Tampoco gustaron a España las reducciones de hasta el 38 por ciento que quiere imponer la comisaria a las capturas de rape en caladeros nacionales porque sería "muy difícil de asumir"para la flota, ni la rebaja del 20 por ciento para el gallo en las mismas aguas.
Antes de iniciarse las negociaciones, fuentes diplomáticas indicaron que España quiere un aumento del 9 por ciento en la cuota de merluza del norte y un "ligero aumento"para la anchoa del golfo de Cádiz, mientras que apuesta por el 'status quo' para el rape y el gallo del Gran Sol y aguas ibéricas. También aceptaría una "ligera reducción"en las capturas de lenguado, por estar la especie sometida
a un plan de recuperación.
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