Finanzas
Los expertos temen un ataque especulativo contra la deuda española
El alto volumen de vencimientos y el excesivo gasto autonómico, factores de riesgo para los inversores.
El Tesoro Público inaugura este jueves la contrarreloj de emisiones de deuda de 2013 con una subasta de bonos a tres, cinco y diez años por la que espera captar hasta 5.000 millones de euros. Esa cifra es aproximadamente la media que tendrá que colocar el organismo que preside Íñigo Fernández de Mesa en cada una de las colocaciones de un ejercicio en el que el volumen total de necesidades de financiación asciende a 230.000 millones de euros. O, lo que es lo mismo, 19.167 millones al mes, a los que hay que restar los más de 11.000 millones de «colchón» con el que España cerró el año pasado.
Demanda e intereses
El alto volumen de vencimientos de deuda a los que se enfrenta España durante este ejercicio (207.173 millones de euros, a los que se añaden los 23.000 millones del Fondo de Liquidez Autonómico–FLA–) es una de las razones por las que los expertos temen que el mercado podría incrementar la presión sobre nuestro país en las primeras emisiones del año (ver gráfico). Así, tanto en el capítulo de la demanda –las entidades nacionales ya controlan paquetes enormes de deuda–, como en el de los intereses –en las últimas subastas se relajaron de forma significativa–, los inversores ya han dado muestras de cierto agotamiento.
Tanto, que el Banco Central Europeo (BCE) deberá jugar otro año más un papel fundamental como «cortafuegos» frente a la posible quiebra de los «too big to fail» del sur de Europa (España e Italia). La fuerte emisión de deuda pública no reducirá su intensidad hasta que los países abandonen la recesión, por lo que la institución que preside el dirigente italiano Mario Draghi podría estudiar una nueva macroinyección de liquidez que permita a la banca seguir acudiendo a las subastas. El mercado espera, además, la inauguración del plan de compra de deuda (OMT) que permita aliviar los balances de las entidades, cargados de bonos europeos.
Miguel Ángel Rodríguez, analista de XTB, asegura al respecto que el mercado lleva «dormido» dos semanas, sin apenas referencias económicas de nuestro país, pero tiene que despertar. El volumen de vencimientos es muy elevado, asegura Rodríguez, que cree que las altas necesidades de liquidez del país le pasarán factura en las subastas. Además, la realidad económica de España aún no ha cambiado lo suficiente, pese a los signos positivos observados en capítulos que no dependen directamente del Estado, cuyo modelo de financiación y funcionamiento se ha mostrado inviable a largo plazo, especialmente por el exceso de gasto en las CC AA. Las claves residen en la ordenación de las cuentas públicas españolas –el objetivo del 6,3% de déficit es historia y el Estado lucha ahora por cerrar 2012 con un 7%– y en la demanda de los inversores extranjeros ante la sobreexposición de los balances de las entidades nacionales.
Este último capítulo parece bajo control tras lo conocido en las últimas fechas, ya que los bancos de inversión estudian redoblar su apuesta por la deuda española al calor de los altos intereses, de la «garantía» del BCE y del compromiso del Gobierno con las reformas y con «poner coto» al descontrol del gasto público.
Mercado secundario y Bolsa
La prima de riesgo de invertir en deuda española escaló ayer hasta los 359,7 puntos básicos, un 2,16% más que el cierre del pasado viernes (352,1 puntos). El interés del bono a diez años creció hasta el 5,112%, mientras que la referencia alemana al mismo plazo se relajó hasta el 1,515%.
En Bolsa, el Ibex 35 recortó un ligero 0,2%, aunque mantuvo los 8.400 puntos gracias al empuje de Basilea, que pretende flexibilizar las necesidades de liquidez para el sector financiero, y el volumen de negocio, que rozó los 1.500 millones de euros.
✕
Accede a tu cuenta para comentar