Rajoy admite que no le gusta que Europa no crezca, aunque España sí lo hará

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reconocido hoy que no le gustó el parón de la zona del euro en el segundo trimestre y que le “encantaría” que a los vecinos les fuera mejor que a España, aunque ha garantizado que pese a todo el país crecerá cada vez más y cumplirá los objetivos de déficit. En un foro de marcado carácter económico organizado por el diario Financial Times, Rajoy ha admitido que “la situación sigue siendo complicada” pero se han superado “los peores momentos” y en 2014 habrá crecimiento económico y del empleo “por primera vez en mucho tiempo” tras haber vivido la crisis “más importante en tres generaciones”.

El presidente ha recordado que el grueso de las relaciones económicas y exportaciones de España se producen con Francia, Alemania, Italia, y en menor medida Reino Unido y Portugal, motivo por el que la situación en esos países “nos afecta muy directamente”, ha subrayado.

La zona del euro tuvo un crecimiento cero en el segundo trimestre del año, en tanto que España consiguió subir en ese periodo un 0,6 % por cuarto trimestre consecutivo.

Un crecimiento del PIB que volverá a darse en el último trimestre del año, ha asegurado sin dar cifras concretas, hasta terminar en un 1,3 % de subida, y en un 2 % el año que viene.

Rajoy ha recalcado que la economía española está “mejor que en 2012 y 2013 y peor que en 2015 y siguientes”, dado que el país seguirá “perseverando” en sus reformas estructurales para que el sector exterior continúe en positivo y continúe la mejora del consumo interno.

También ha dejado claro que España cumplirá este año con el objetivo del déficit del 5,5 % del PIB, un indicador cuya bajada en plena recesión supuso un “enorme esfuerzo” para la sociedad española, ha recordado.

“El objetivo del 5,5 % este año lo cumpliremos y así deberemos continuar en el futuro”, ha señalado.

En cuanto al problema del desempleo, Rajoy ha asegurado que continúa siendo la principal prioridad de su Gobierno y ha recalcado que ha habido un cambio fundamental y ya se crea empleo neto en España.

“Pero eso es insuficiente y lo que tenemos que hacer es perseverar y seguir trabajando”, ha dicho.

Al respecto ha explicado que se prestará especial importancia a la formación de los trabajadores y las ayudas a la contratación de las empresas, y ha expresado su confianza en los frutos que ya está dando la reforma laboral.

En todo caso, el jefe del Ejecutivo ha lamentado el carácter estructural del desempleo en España, y ha recordado que incluso cuando entraban en España seis o siete millones de extranjeros la tasa de paro estaba en el 6 o el 7 % de la población activa.

En resumen, el presidente del Gobierno ha destacado que España “ha enfocado con claridad el camino de la recuperación” y “ha sabido mantener los pilares fundamentales del estado del bienestar”.

Preguntado por el debate de la austeridad en Europa y por las peticiones de Francia e Italia de una relajación en los objetivos de déficit para asegurar el crecimiento, el presidente ha eludido dar consejos, pero ha relatado la experiencia española al respecto.

“Yo no le voy a decir a la Comisión Europea, a Francia ni a (presidente de Italia, Mateo) Renzi lo que tienen que hacer, pero mi experiencia propia me dice que cuando se presenta un plan sensato, razonable y con visos de cumplimiento se puede hablar y se llega a un entendimiento. Estoy convencido de que así va a ser y ojalá así sea”, ha concluido.