Hipotecas
¿Subrogar o refinanciar? Así es como puede mejorar las condiciones de su hipoteca
Las condiciones financieras y las normas que regulan una hipoteca podrán cambiar con el paso de los años, al tratarse de un producto de larga duración
Los préstamos hipotecarios son un producto financiero casi imprescindible para quienes quieren adquirir una casa, ya que les permite disponer de una "importante cantidad de dinero" para financiar esta operación, detalla el Banco de España (BdE).
La entidad financiera no presta el dinero gratuitamente, sino que espera recuperarlo, así como los intereses asociados a este crédito. A veces, las condiciones financieras y las normas que regulan una hipoteca podrán cambiar con el paso de los años, al tratarse de un producto de larga duración. Es por ello, que muchos bancos intentan atraer a nuevos clientes planteando una mejora de las condiciones que puedan tener. Para ello, existen diferentes formas de maneras de plantear el traslado de una hipoteca de una entidad financiera a otra.
Una puede ser la subrogación, que consiste en modificar las condiciones iniciales en las que se firmó dicha hipoteca, por lo que se cambia este crédito de un banco a otro en el que se puedan negociar aspectos como las comisiones, los tipos de interés o el plazo de amortización.
Durante 2023, el Gobierno implementó el Código de Buenas Prácticas, suprimiendo las comisiones por los cambios de hipotecas variables a fijas o mixtas, prohibición que se prorrogó también durante 2024. No obstante, la comisión por subrogación ha vuelto a estar vigente este año. Por tanto, en el momento en el que se quiera subrogar la hipoteca, le cobrarán al prestatario la tasación -que costará entre 300 y 400 euros- además de una comisión entre el 0% y el 2%.
"Todos estos gastos se suelen amortizar con el ahorro que conlleva hacer la subrogación de hipoteca. Los gastos del proceso (notariales, de gestión o registrales) los paga el banco en que se hace el préstamo", asevera la inmobiliaria online Housfy.
La refinanciación es otra de las alternativas. Y, en este caso, en vez de pasar el préstamo a otra entidad, este se cancela y se contrata una hipoteca en otro banco.
Optar por esta opción permite al hipotecado realizar más cambios en las condiciones del préstamo que una subrogación. Sin embargo, aunque ofrezca un mayor abanico de opciones, esta elección puede conllevar más gastos. Cómo se liquida una hipoteca para empezar una nueva, se debe pagar la tasación a la vez que una comisión de apertura (aunque no todos los bancos la suelen cobrar). Además, también se pueden añadir los gastos para cancelar registralmente la hipoteca liquidada -a un precio medio de 1.000 euros- y una comisión por amortización anticipada, que puede ser entre el 0% y el 2%.
"En un caso básico de mejoras de condiciones, puede ser que subrogar la hipoteca sea la mejor opción, pero en casos más concretos o complejos, la idea de refinanciar puede estar sobre la mesa de muchos hogares", sentencian.