Educación

Carlos Vargas: "En los últimos siete años se ha duplicado la tasa de deserción de profesores"

El jefe de desarrollo docente de la Unesco afirma que hay una mayor proporción de hombres en cargos de liderazgo educativo

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Carlos VargasEuropa Press

La situación del profesorado es un asunto que siempre ha estado estancado en las políticas educativas. La Fundación SM y la UNESCO acaban de presentar en primer informe mundial sobre los docentes en el que se hace una llamada urgente a actuar para paliar la escasez de profesionales que deciden abandonar la profesión por las condiciones laborales. Carlos Vargas, jefe de desarrollo docente de la Unesco, hace una reflexión sobre esta circunstancia preocupante.

El informe mundial de la profesión docente de la Unesco estima que faltan docentes. ¿Cuántos calcula que harían falta en España?

El informe calcula que en el mundo hacen falta 44.000.000 de docentes, solamente para asegurar la educación primaria y secundaria universal. Si sumamos a ello la educación de la primera infancia, desde la educación preescolar, estaríamos hablando de 52.000.000 de docentes que hacen falta en el mundo. Estos se distribuyen de distinta manera en los distintos continentes. En el caso de Europa, estamos hablando de casi 4,8 millones de docentes que hacen falta para garantizar una primaria y secundaria universal.

¿Por qué hay falta de profesorado en ciertas áreas clave?

Esta escasez de docentes tiene ciertas características. No es la misma en distintos países, ni dependiendo del área disciplinar de que se trate. Asistimos, por ejemplo, a una escasez mayor en áreas de ciencias y tecnologías, pero también de humanidades y de artes. Y también a una escasez de docentes en zonas rurales. Además, hay una escasez de diversidad en la fuerza docente, no solamente en términos lingüísticos, sino también de género.

Hay una desproporción importantísima: vemos una feminización de la docencia en los primeros años, particularmente en la educación inicial, pero esta proporción se va transformando conforme se avanza en los niveles educativos. En la educación postsecundaria, en la Formación Profesional, en la universidad y particularmente en las materias STEM, vemos una preeminencia de hombres más que de mujeres. Lo mismo sucede en los puestos de liderazgo educativo.

Así que, cuando hablamos de escasez, hablamos de escasez con distintos rostros: por un lado, la diversidad; por otro, la igualdad de género; luego, las asignaturas; y también los entornos rurales y urbanos diversos, etc.

¿El profesor debe estar bien preparado para ejercer su labor ante los desafíos que representa el mundo actual? ¿Podríamos decir que un profesor finlandés, o de otro país, está mejor preparado que un español para el desempeño de su profesión?

Ciertamente, yo no diría que un profesor finlandés o de otro país esté mejor preparado que un profesor español. Lo que sí diría es que distintos países tienden a concebir el trabajo docente de distinta manera, y eso hace una diferencia al momento de hacer clase.

Por ejemplo, en el caso de Finlandia tenemos un ejemplo claro. En el informe encontramos que es un país que tiene plena confianza en el desempeño de sus docentes. En los últimos años han abolido la inspección: no hay un cuerpo que vaya a visitar las escuelas para comprobar que los profesores estén trabajando en los temas que tienen que trabajar. Hay un tema de confianza, que es algo muy importante y que remarca el informe. Tenemos que confiar en el saber hacer de las y los docentes. Para ello deben tener un proceso de formación que los habilite para la autonomía, la agencia, la toma de decisiones. Y eso es algo que vemos que se fomenta en el desarrollo profesional docente en Finlandia.

¿Esto significaría que el profesor finlandés está mejor capacitado?

No, significa que hay una manera de concebir la docencia distinta, en la cual los docentes son profesionales autónomos que toman decisiones educativas: desde el currículo, hasta la evaluación y la clase y, porqué no, el sistema educativo.

El informe aboga porque los profesores puedan tener niveles y márgenes de autonomía cada vez mayores, que les permitan tanto desempeñar mejor su labor como involucrarse intelectualmente en la educación.

¿Cuáles son las cualidades que hoy en día debería reunir un docente? ¿Debería haber una selección previa antes de permitir que una persona se dedique a la enseñanza?

Un profesor no es solamente un transmisor de conocimientos, no es solo un implementador de currículo. Es un intelectual público. Un profesor, una profesora, a final de cuentas, es un profesional reflexivo que conoce un repertorio de prácticas pedagógicas y didácticas, y que las pone en juego con base en su criterio y juicio pedagógicos. Esto es lo que hace a un buen docente. Esas son las cualidades que hoy en día deberían reunir los docentes. La formación docente, tanto inicial como en servicio, debe estar marcada por esa ampliación de la autonomía y por esos repertorios de capacidades, para que las y los docentes puedan trabajar.

El estudio habla de que el 11% de los profesores estaría dispuesto a abandonar su profesión si encontrara otro trabajo mejor. ¿Cuál cree que es la causa?

En Europa, en particular, el 90% de la escasez de docentes no se debe a un aumento en la demanda de profesorado, sino a que las y los profesores abandonan el aula. En los últimos siete años se ha duplicado la tasa de deserción de docentes, particularmente en Primaria, aunque no exclusivamente. Y eso va de la mano de las condiciones de trabajo del profesorado.

¿Cuáles serían esas condiciones exactamente?

Por un lado, las condiciones materiales de trabajo: los sueldos, la remuneración, los recursos. Y por otro, las condiciones simbólicas: la confianza, la autonomía, la agencia que pueden tener los profesores para hacer clase y tomar decisiones. Ciertamente, la deserción es uno de los temas más importantes a abordar, y tiene que ver con mejorar las condiciones de trabajo, la remuneración, y con ampliar las capacidades y la toma de decisiones de los docentes.

Como vemos, muchas veces no se toma en cuenta el conocimiento práctico de la vida cotidiana, de las vivencias del aula, en las grandes reformas educativas. Muchas veces por ello fracasan. Hemos visto reformas curriculares que no fructifican, y tiene que ver con que no se toma en cuenta la voz de las y los docentes. Nos parece muy importante que en la política educativa esté presente la voz de los profesores, de los conocedores en profundidad de la educación.