Movilidad

Los retos pendientes para una verdadera movilidad eléctrica

Aunque existe una red de carga rápida, los expertos aseguran que está poco utilizada, lo que dificulta también la construcción de nuevos puntos

Puntos de recarga en un garaje
Puntos de recarga en un garaje Agencias

Muchos aún recuerdan la imagen de una fila de coches eléctricos esperando para recargar su batería a la vuelta de un largo puente. Una situación que, según muchos implicados en el sector de la movilidad eléctrica, es cosa del pasado puesto que España ya tiene una red de recarga rápida que hace factible que los trayectos de larga distancia se puedan hacer con este tipo de vehículos.

Pero, al mismo tiempo, estas mismas voces desgranan cuáles son algunos de los retos que tenemos pendientes para que la movilidad eléctrica en España sea una plena realidad.

Así, AEDIVE (Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica) afirma que existe una red de recarga "más que dimensionada" para el parque actual de vehículos eléctricos, especialmente en lo que respecta a la recarga de alta potencia. A esto se suma una amplia oferta de turismos 100% eléctricos con baterías de alta densidad y capacidad de recarga rápida, permitiendo una experiencia de uso similar a los vehículos de combustión. Daniel Pérez, CEO de Zunder, coincide en que los viajes largos en vehículo eléctrico son una "realidad cotidiana". La red de Zunder, según Pérez, cubre más del 96% de las principales carreteras españolas con estaciones cada 200 km.

Sin embargo, Iván Lequerica, Vicepresidente de EMEA en Geotab, aporta una perspectiva desde las flotas, señalando que incluso para aquellas que realizan largas distancias, el 28% de los vehículos podrían ser reemplazados por vehículos eléctricos con autonomía suficiente para sus tareas diarias. Es decir, que aunque es cierto que los avances son notables, aún existe margen de mejora y adaptación para ciertos perfiles de uso.

Infraestructura de recarga

En una situación en la que no sé sabe qué fue antes si el huevo o la gallina), la cuestión de si la infraestructura de recarga está a la altura de la demanda o si hasta que no haya demanda no habrá esta infraestructura sale a la palestra. AEDIVE sostiene que ambas van de la mano, y que, aunque la primera está dimensionada para dar una respuesta sólida a los usuarios, la media de uso se sitúa por debajo del 5%, por lo que es económicamente inviable desplegar aún más una red que ya consideran "sobredimensionada". En su lugar, abogan por informar adecuadamente al usuario sobre la realidad de la red existente y combatir la desinformación sobre su supuesta falta.

Por otro lado, Daniel Pérez de Zunder cree que en Europa se ha superado este dilema y asegura que mientras el parque de BEV crece alrededor del 50% anual, la infraestructura de carga lo hace a más del 120%, resultando en 1 punto de recarga por cada 5 vehículos eléctricos. Esta proporción, según Zunder, contrasta favorablemente con los combustibles fósiles.

La transición hacia los vehículos eléctricos también ofrece importantes oportunidades para las flotas ligeras. Iván Lequerica de Geotab subraya que la electrificación "beneficia a todos, incluidas las flotas", gracias a los ahorros en combustible, mantenimiento y emisiones. Un análisis de Geotab concluyó que el 75% de los vehículos ICE en Europa y en España podrían reemplazarse por un vehículo eléctrico con autonomía suficiente para cubrir las distancias diarias con una sola carga, con una autonomía restante de al menos 25 km.

El transporte pesado de mercancías

Donde existe un consenso es en que el transporte pesado de mercancías es un gran desafío para la electrificación de la economía.

AEDIVE reconoce que en este sector queda un trabajo importante por desarrollar para ofrecer una red de recarga de alta potencia suficiente que brinde seguridad a los transportistas, de cuya rentabilidad depende. Si bien algunas rutas se están electrificando, AEDIVE subraya la necesidad de un trabajo conjunto entre fabricantes de vehículos, operadores de recarga y transportistas para ofrecer garantías en el servicio. Daniel Pérez de Zunder también menciona que el sector trabaja en extender la electrificación al transporte pesado y a la logística, considerándolo un "reto importante" en los esfuerzos europeos de descarbonización. Zunder ya está desarrollando estaciones adaptadas a este nuevo desafío.

El papel de la experiencia de pago

Un aspecto fundamental para la generalización de la movilidad eléctrica es la facilidad y comodidad del pago en los puntos de recarga. Así al menos lo defeinde Eduardo Prieto, Director General de Visa en España, quien subraya que la experiencia de pago es "crucial para el éxito de la movilidad eléctrica", y que cargar un coche debería ser "tan fácil como comprar un café".

Prieto lamenta que, a finales de 2024, solo el 9,1% de los puntos de recarga en España disponía de lector de tarjetas, y apenas un 4,6% contaba con tecnología sin contacto. Esta situación contrasta con las expectativas de los consumidores, ya que más del 80% cree que debería poder pagar con tarjeta. La buena noticia es que el reglamento europeo AFIR exigirá lectores de tarjetas en nuevos cargadores rápidos. Visa está trabajando para promover la interoperabilidad y la estandarización del pago en las electrolineras.

Sin embargo, Daniel Pérez de Zunder afirma que los desafíos iniciales asociados a la complejidad en los métodos de pago han quedado atrás. En todas las estaciones de Zunder, el pago es "simple y directo con tarjeta bancaria", sin necesidad de aplicaciones, además de ofrecer otras soluciones.