Vuelos
La falta de transparencia y opacidad con la que el Gobierno de coalición está gestionando la crisis migratoria está detrás de varias filtraciones que confirman, que pese al estado de alarma en el que está inmerso el país y la crisis sanitaria, muchos inmigrantes están abandonando el archipiélago canario en vuelos comerciales con destino a la Península o incluso a Europa.
Se están haciendo traslados hacia fuera de España, especialmente durante el fin de semana y de cien en cien, según ha podido saber LA RAZÓN. Pese a que el Gobierno se afana en lavarse las manos y asegura que «el Ministerio del Interior no organiza, ni gestiona, ni financia traslados de migrantes desde Canarias hacia la Península», varios documentos policiales, a los que ha tenido acceso este medio, prueban que tiene conocimiento de la llegada de vuelos regulares desde Canarias hasta otras provincias.
Bajo el título «Instrucciones operativas para el apoyo al aeropuerto de Manises», el documento incluye las instrucciones de un operativo especial de cara a la llegada de cinco vuelos procedentes de las Islas Canarias que arribarán a Valencia entre mañana y el viernes. Se trataría de otro grupo distinto tras la llegada durante el Puente de la Inmaculada y la Constitución de entre 300 y 400 personas.
No en vano, pese a que todos los miembros del Ejecutivo niegan estos traslados, existen pruebas gráficas y testimoniales de desplazamientos a al menos seis ciudades españolas en los últimos meses. Además, de las dos mencionadas en la Comunidad Valencia, se han gestionado reubicaciones a la Granada, Huelva, Málaga o Sevilla. Lo más llamativo es que todos estos traslados se están produciendo con cierres perimetrales y prohibiciones para moverse entre las distintas comunidades debido a la pandemia.
Según explican fuentes policiales a LA RAZÓN, los inmigrantes para viajar necesitan dos cosas: estar totalmente identificados y, por otro lado, un permiso de entrada excepcional por un número de días concretos que emite la Comisaría General de Extranjería y Fronteras. Eso solo para coger un avión. Debido al cierre perimetral tienen que llevar un justificante o autorización que emite cualquier administración y comprueban las autoridades antes de que suban en el avión. Es decir, todos estos controles se realizan en origen. Cuando pisan la Península se presupone que los han superado y que cumplen con la normativa vigente.
Está descoordinación y falta de transparencia llevó ayer al Sindicato Unificado Policial (SUP) a pedir amparo al Consejo de Transparencia y Buen Gobierno para acceder a los datos sobre los vuelos en los que cientos de ciudadanos subsaharianos llegados a Canarias en patera en los últimos meses.
La situación que atraviesa el archipiélago canario como consecuencia de la llegada masiva de inmigrantes a sus costas es preocupante. Sin plazas para alojar a los rescatados en el mar lo que ha obligado a contratar hoteles turísticos y con el Ejecutivo central improvisando la estrategia migratoria, son varios los líderes locales que reclaman ayuda a Europa para salir solucionar este problema.
Sin ir más lejos, el presidente canario, Ángel Víctor Torres, intervino ayer de forma telemática en el pleno del Comité Europeo de las Regiones, donde solicitó un apoyo específico por parte de la Unión Europea que permita al archipiélago hacer frente a la crisis migratoria.
No en vano, las Islas no dejan de ser la puerta al continente europeo y muchos de los que llegan lo hacen con la intención de cruzar los Pirineos para llegar a otros países y reunirse con sus familiares o amigos en otros puntos del continente. Con el objetivo de que Europa no olvide lo que está sucediendo en las Islas, el Grupo Popular Europeo ha propuesto debatir en el próximo pleno del Parlamento Europeo, que se celebra la semana que viene, la crisis migratoria en Canarias.
Según ha podido saber LA RAZÓN, la propuesta se presentó durante la conferencia de presidentes de los grupos políticos, que decide antes de cada Pleno la agenda del mismo. El título del debate propuesto era «The situation of the migratory crisis in Canary Islands». Votaron a favor el Grupo Popular Europeo y el Grupo Conservador (donde está inscrito Vox). En contra votaron el Grupo Socialista Europeo, el grupo de Izquierda Unitaria Europea (donde está Podemos), el grupo Renew (donde está Ciudadanos) y el Grupo de los Verdes. Por tanto, estos últimos grupos vetaron el debate, logrando que no se celebre la próxima semana. No obstante, según recuerdan fuentes europeas, en los últimos años el Parlamento Europeo sí ha debatido crisis similares en islas como Lampedusa (Italia) o Lesbos (Grecia).