Movilizaciones

La España Vaciada da un ultimátum a Sánchez para que cumpla: amenaza con agitación social

Teruel Existe exige las ayudas a empresas para la contratación en zonas despobladas: están consignadas en los presupuestos de 2022, pero no se han materializado

MANIFESTACION EN EL CENTRO DE MADRID POR LA DESPOBLACION DE LAS ZONAS RURALES BAJO EL LEMA "REVUELTA DE LA ESPAÑA VACIADA".
MANIFESTACION EN EL CENTRO DE MADRID POR LA DESPOBLACION DE LAS ZONAS RURALES BAJO EL LEMA "REVUELTA DE LA ESPAÑA VACIADA".jesús g. feriaLa Razón

La voz de la España Vaciada está teniendo eco esta legislatura, en la que el Gobierno dispone de una mayoría muy frágil y algunas votaciones acaban saliendo adelante con márgenes muy estrechos. La mayor muestra de ello fue en la sesión de investidura, donde el diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, fue determinante para que Pedro Sánchez saliera elegido presidente. Y Guitarte, representante del movimiento de la España Vaciada en el Congreso, lleva dos años y medio como socio del Gobierno y, a tenor de las votaciones, es bastante fiable porque está apoyando la gran mayoría de las iniciativas de Moncloa (siempre a cambio de un acuerdo), aunque empieza a mostrarse bastante molesto por los incumplimientos.

Sobre todo, con uno de ellos, que es una de las medidas estrella que incorporaban en el programa electoral: una fiscalidad diferenciada para atraer gente y empresas y reflotar las zonas despobladas de España. Y una de las vías para materializar esa medida pasa por ayudas a las empresas para la contratación: en concreto, es una bonificación del 20% de los costes laborales de compañías en tres provincias (Teruel, Soria y Cuenca).

La medida cuenta con la autorización de la Unión Europea desde abril de 2021 porque son provincias con una densidad de población inferior a los 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado (también incluiría a las zonas limítrofes) y está consignada en los presupuestos de 2022 (tras un acuerdo entre Teruel Existe y el Gobierno), pero el ejecutivo de Pedro Sánchez sigue sin cumplir. Y quedan ya poco menos de cinco meses para que concluya este 2022. Por ello, Guitarte, en declaraciones a este diario, exige que el Gobierno la apruebe por la vía de urgencia: es decir, mediante decreto para que luego sea convalidada en el Congreso y se ponga en marcha lo antes posible, mientras luego se tramita y se mejora el texto normativo como proyecto de Ley.

De no activarse esta medida pronto, Guitarte advierte de que la España Vaciada volverá a echarse a las calles este otoño. “Si no se toman nuestra medidas, no vamos a quedarnos quietos. Si no se hacen, tenemos claro que la sociedad se va a movilizar porque es una demanda que viene de hace muchos años”, señala, en un aviso a un Gobierno que tiene que afrontar unos meses por delante con un clima social ya de por sí agitado por el deterioro de la economía a causa de la inflación. La situación es delicada.

“Se tienen que cumplir en 2022 porque están presupuestados para 2022″, afirma, dando un ultimátum al Gobierno, y lamenta que no se haya puesto ya en marcha este mecanismo desde hace tiempo porque “todo el mundo ve razonable que se haga”. “No se sabe muy bien por qué se retrasa en llegar”, asevera.

Lo cierto es que es una medida importante para las plataformas provinciales que articulan el movimiento de la España Vaciada (en la que destacan Teruel Existe y Soria Ya por su representación parlamentaria) porque puede convertirse en uno de los pilares para repoblar las provincias que se han ido quedando deshabitadas. Y puede ser así porque es una medida que ha demostrado efectividad en otros países europeos donde se ha aplicado (como Suecia) y cuenta con un importante apoyo de los agentes sociales.

En cualquier caso, la medida busca tanto atraer empresas como ayudar también a las que hay (que también están atravesando problemas derivados de la delicada situación económica que se ha encadenado con la pandemia y la inflación), para evitar que se siga agravando el problema de la despoblación. Es un medida con un horizonte indefinido, hasta que dé resultados, lo que, según atisba Guitarte, podría ser en una década.

La economía, por tanto, se va a convertir en el principal caballo de batalla del Gobierno en los próximos meses: primero, con la gestión de la inflación; segundo, con el abordaje de la crisis energética y la amenaza de un desabastecimiento en Europa por la guerra de Ucrania; y, tercero, con esta reivindicación de la España Vaciada.